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La senadora Lilian Samaniego, líder de la bancada de colorados “independientes” o excartistas, cuestionó ayer los antecedentes del camarista Alberto Martínez Simón, adelantó su voto y así lo hizo por Rubén Darío Romero. La acompañaron en la votación dos colorados, Mirta Gusinky y el oficialista Enrique Bacchetta, cuestionado titular del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados (JEM).
En su intervención ante el pleno de la Cámara Alta, la senadora Samaniego lamentó que numerosos magistrados, incluyendo Martínez Simón, hayan fallado en favor del miembro del Consejo de la Magistratura (CM) Cristian Kriskovich cuando fue denunciado por acoso sexual contra su alumna de Derecho de la Universidad Católica “Nuestra Señora de la Asunción”.
También fustigó que la presunta víctima finalmente de ser denunciante pasó a ser imputada y que magistrados y fiscales rechazaron su solicitud de realizar la pericia forense a su teléfono celular, donde recibía los mensajes de Kriskovich. “Él puede tener la idoneidad pero no la autoridad moral”, recalcó. Poco después salió en defensa de Martínez Simón el senador oficialista Juan Carlos Galaverna, quien acusó a Samaniego de mostrar al flamante ministro de la Corte como el “acosador”.
Incluso se burló de la capacidad de Kriskovich para influir sobre el presidente de la República Mario Abdo Benítez y la mayoría de los senadores. También acusó a la presunta víctima, María Belén Whittingslow, de que en realidad se negó en reiteradas oportunidades a entregar su aparato celular.
Por su parte, Samaniego respondió a Calé Galaverna que no buscaba mostrar al magistrado como acosador, sino como un funcional al mismo.
Bajac lo rechazó por masón
La senadora liberal Eugenia Bajac fue la única legisladora llanista que no acompañó la designación de Alberto Martínez Simón y votó a favor de Rubén Darío Romero. No explicó el motivo, pero sería una protesta contra el flamante ministro de la Corte por pertenecer a una logia masónica. Bajac, hija del cuestionado exministro de la Corte Óscar Bajac, incluso ejerce ilegalmente su cargo, dado que es inhábil por no haber renunciado a su condición de pastora.