La citada ley modifica varios artículos del Código Electoral que refieren a cómo se establecerán los beneficios económicos para los partidos del Estado. Por ejemplo, solo participarán de la distribución de aportes las agrupaciones que acrediten haber obtenido un número de votos en las últimas elecciones para el Congreso, no inferior al 2% (70.000 votos) del padrón nacional. Esta disposición afectará a los partidos pequeños. En cuanto a los subsidios, la ley de financiación de partidos establece que se repartirá de acuerdo al número de bancas en el Congreso y juntas departamentales y municipales.