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Masi presentó ayer al fiscal general Javier Díaz Verón un escrito donde cuestiona la recusación que hizo Canillas contra el fiscal que indaga la causa desde enero de este año, Leonardi Guerrero.
La senadora aduce que llamativamente la recusación se dio cuando su defensa solicitó a Guerrero la desestimación de la denuncia, luego de que una pericia técnica demostrara que Canillas –quien denunció el caso pero no es parte al no ser víctima– alteró el orden cronológico de mensajes que se enviaron al grupo SOS Paraguay, de Whasapp, para tergiversar la conversación entre los senadores opositores que estaban interactuando.
El abogado Guillermo Duarte, representante legal de Masi, indica en el escrito que la inconducta procesal de Canillas se dio desde el inicio, ya que este creó una historia fantástica sobre cómo llegó a su poder las capturas de los mensajes privados.
“El corolario de sus inconductas procesales o su mala fe es su desconocimiento, debido a que sin ser parte recusa al fiscal, herramienta reservada con exclusividad a las partes”, dice Duarte.
La senadora pide así que sea rechazada esa recusación que considera es al único efecto de dilatar el “archivo” del caso.