Según Cancillería, el criticado Pacto Global de Migración beneficia al país

Ante las críticas en Paraguay por la aceptación del Pacto Global de Migraciones por parte del Gobierno, la Cancillería emitió un comunicado argumentando, entre otras cosas, que fue con base en la postura a favor de la Iglesia Católica y en beneficio de los paraguayos en el exterior.

/pf/resources/images/abc-placeholder.png?d=2074

Cargando...

La Cancillería Nacional, a cargo de Luis Castiglioni, emitió en la noche del viernes, un comunicado en el que explica los motivos para la adopción del Pacto Global de Migraciones por parte del Gobierno paraguayo, ante las críticas de un sector en nuestro país.

En primer lugar explica que la adopción se da respetando el artículo 143 de la Constitución Nacional que habla de que el Paraguay acepta el derecho internacional y se ajusta a los principios de solidaridad y cooperación internacional.

Seguidamente, señala que la Iglesia Católica y el mismo papa Francisco han visto el pacto con esperanza por la preocupación ante las situaciones que los migrantes atraviesan en el mundo.

“Cada forastero que llama a nuestra puerta es una ocasión de encuentro con Jesucristo, que se identifica con cada extranjero acogido o rechazado en cualquier época de la historia... A cada ser humano que se ve obligado a dejar su patria en busca de un futuro mejor, el Señor lo confía al amor maternal de la Iglesia”, dijo el Papa y que la Cancillería recordó.

En tercer lugar, la Cancillería pone énfasis en que existe más de un millón de compatriotas que residen en el exterior y que como obligación moral el Gobierno debe apoyar posiciones que sean propicias para el bienestar de los mismos y el de sus familias, “con el fin de evitar que sean sometidos a tratos denigrantes o situaciones de irrespeto a sus derechos fundamentales, por la mera condición de ser migrantes”.

Explican que el pacto establece, entre otras cosas, la protección de los derechos humanos de migrantes en todo momento, así como el rechazo a medidas que criminalicen los movimientos migratorios. Se asume el aporte positivo que puedan dar los migrantes y se comprometen a crear canales seguros para la movilidad humana. El pacto condena la xenofobia, racismo, discriminación y otras formas conexas de intolerancia.

“El pacto no es vinculante, sino de carácter moral. No constituye un tratado ni un acuerdo internacional. En otras palabras, no obliga a los Estados a recibir migrantes ni a darles nada fuera de lo contemplado en sus propias leyes”, dice la nota.

Castiglioni participará mañana y el martes en Marrakech, Marruecos, de la Conferencia intergubernamental para el Pacto Mundial para una Migración Segura, Ordenada y Regular.

La adhesión al pacto es motivo de discusión y profundo debate no solo en nuestro país sino en muchos otros, con posturas distantes acerca de los beneficios o no que pudiera generar.

Enlance copiado
Content ...
Cargando...Cargando ...