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Katherine Acosta Piedra (19) y Lisandra Infiesto Rodríguez (21) se encuentran detenidas en la comisaría de mujeres, en el barrio Santísima Trinidad.
Katherine y Lisandra son ciudadanas de una gigantesca prisión llamada Cuba. Paraguay se convirtió en el primer viaje de sus vidas; está a un paso de convertirse en un infierno.
Ambas jóvenes fueron detenidas en el aeropuerto internacional Silvio Pettirossi, en la madrugada del martes 29 pasado.
Agentes del servicio de migraciones de El Salvador (Centroamérica) las expulsaron del país por tenencia de pasaportes falsos; dado que el aeropuerto de embarque fue Asunción, llegaron aquí en carácter de deportadas.
En la mañana de ayer conversamos con ellas: el temblor en los labios de Katherine indica miedo, mientras que los ojos de Lisandra reflejan incertidumbre por el futuro que puedan tener en nuestro país.
Son muy jóvenes y están terriblemente asustadas. “En diciembre comenzamos a visitar la Embajada de Paraguay en La Habana para solicitar nuestra visa de ingreso. Katherine y yo somos amigas, vivimos en el mismo barrio. Estábamos muy ilusionadas porque nos atendían muy bien”, expresó Lisandra al recordar el inicio del periplo.
Tema pasaporte
Lisandra trabajaba como docente en una escuela primaria donde ganaba 20 dólares mensuales.
“No hay forma de vivir en Cuba, es imposible. La situación económica es terrible, y cada día que pasa es peor. Queremos tener una oportunidad para vivir mejor”, agregó Lisandra.
El vía crucis comenzó en Ciudad de Panamá, donde llegaron el viernes 25 de enero. “Se acercaron dos hombres con el mismo uniforme de los agentes de migración. Pidieron nuestros pasaportes y nos dijeron que era imposible entrar en Paraguay con pasaporte cubano porque el país fue expulsado del Mercosur”, dijo Katherine.
Siguió diciendo que “la única forma de llegar a Asunción era con pasaporte panameño. y nos ofrecieron por mil dólares cada uno. Estábamos aterrorizadas y decidimos comprar”.
Jóvenes, sin experiencia y con miedo a perder la oportunidad de salir de Cuba, quedaron con los pasaportes panameños. Los avivados se apoderaron de sus documentos cubanos.
Llegaron a Paraguay el sábado 26, ingresaron sin problemas y salieron con destino a Miami el lunes 28, con escala en San Salvador.
Allí la policía salvadoreña descubrió que los pasaportes eran falsos. En Asunción entraron y salieron sin que los funcionarios de la Dirección de Migraciones se percataran de la irregularidad.
Ahora están detenidas y procesadas. Hoy deberán presentarse ante el juez de garantías Alberto Sosa.
El magistrado decidirá el destino de dos jóvenes cubanas que salieron de una isla que no es un paraíso.
roque@abc.com.py