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Hace poco menos de una semana Venezuela activó el mecanismo de solución de controversias del Mercosur y reclamó su exclusión del bloque por no haber cumplido con la incorporación de las normas a su legislación. El país caribeño recurrió al mecanismo previsto en el Protocolo de Olivos, porque sostiene que su salida fue irregular.
El mecanismo de solución de controversia se inauguró la semana pasada en Montevideo, Uruguay, con el reclamo de Venezuela. En esa ocasión se recibió la posición planteada por Venezuela y se acordó que los coordinadores de los países integrantes del bloque y que conforman el organismo tendrán una primera reunión el próximo 9 de febrero en Montevideo. Antes de esa reunión no se tratará el caso.
Para entonces Venezuela, así como los cuatro países fundadores del bloque, Argentina, Uruguay, Brasil y Paraguay deberán nombrar sus árbitros para tratar y resolver la queja planteada por el país caribeño. Un dato fundamental es que en la primera reunión Paraguay no participó del encuentro. Por tanto, el mecanismo no está en pleno funcionamiento.
Aun cuando el mecanismo se activó, en fuentes diplomáticas sostienen que el caso Venezuela entró en un callejón sin salida. Ven muy difícil que el reclamo prospere atendiendo que la exclusión está apoyada en claras faltas cometidas por el país caribeño al no incorporar todas las normas del Mercosur a su ordenamiento jurídico. Además tampoco existió atropelló alguno cuando al término del periodo de Venezuela asumió la presidencia pro tempore Argentina. “El reclamo de Venezuela no tiene mayor sustento y va camino a naufragar”, indicaron.
El ministro de Exteriores de Uruguay, Rodolfo Nin Novoa, indicó la semana pasada en Montevideo que “el Mercosur tiene la disyuntiva de seguir funcionando con los cuatro países fundadores y en consecuencia hemos resuelto seguir este camino de fortalecimiento del Mercosur”.
Entre los ministros de Relaciones Exteriores de los países fundadores del bloque tampoco cayó bien que la canciller venezolana, Delcy Rodríguez, haya irrumpido la semana pasada en la sede de la Cancillería Argentina.