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Ayer en la Cámara de senadores se presentó un proyecto de ley para declarar el 30 de setiembre como “día nacional por los derechos de las personas lesbianas, gays, transgéneros, bisexuales e intersexuales (LGBT)”, firmado por los senadores Carlos Filizzola, Esperanza Martínez, Hugo Richer, Sixto Pereira, del Frente Guasu, y la senadora Desirée Masi, del Partido Democrático Progresista.
La intención es hacer “hincapié en la igualdad y no discriminación, tanto del sector público como del privado”, hacia la comunidad LGBT en nuestro país, según argumentan los proyectistas.
La propuesta de ley además menciona en el artículo 2 el instar a las organizaciones y entidades del Estado a celebrar esta fecha como “forma de sensibilización y concienciación ciudadana”.
En el mismo artículo se hace énfasis en que se “insta al Ministerio de Educación y Cultura a incorporar al calendario educativo actividades de reflexión sobre la memoria histórica con relación a la represión sufrida por estas personas durante la dictadura stronista”.
La fecha justamente fue escogida en conmemoración a uno de los más sonados casos de represión durante la dictadura de Alfredo Stroessner, donde tras el asesinato del locutor radial Bernardo Aranda, el 1 de setiembre de 1959, se hizo una serie de detenciones de personas de “dudosa conducta moral” acusadas de homosexuales, que en total sumaban la cifra de 108, número que se grabó en la memoria colectiva relacionándolo a estas personas.
Por su parte, Erwing Augsten, activista en favor de los derechos de LGBT, defendió la iniciativa así como la de la Secretaría de Cultura que declaró de interés cultural la Marcha del orgullo LGBT, indicando que la actividad presenta diversas propuestas culturales y un cargado contenido político.
Por su parte, el senador Richer dijo que la discriminación a este sector es similar al caso de las trabajadoras domésticas, que reclaman los mismos derechos salariales que otros empleados.
El legislador además cuestionó a quienes argumentan cuestiones ideológica para no atender reclamos de sectores que históricamente fueron desatendidos.
Contra iniciativa de Cultura
Ayer, cerca del mediodía, la mayoría de los concejales municipales se retiraron de la sala de sesiones de la Junta Municipal, dejando sin quórum la sesión, cuando el concejal Yamil Esgaib pidió el rechazo de manera categórica y contundente a la Resolución N° 141/13 de la Secretaría Nacional de Cultura, por la cual se declaró de Interés Cultural la “10ª Marcha del orgullo LGBT - De fiesta, con orgullo y en protesta”.
Los ediles en disidencia explicaron que tomaron la decisión de abandonar la sala, porque la Junta Municipal no tiene por qué aprobar o rechazar ninguna resolución emanada de una institución ajena a la Municipalidad de Asunción.