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El Foro de Oficiales Generales Retirados, en un pronunciamiento ante la asunción de un nuevo gobierno, expresó su optimismo por la gestión de las autoridades “surgidas de unas ejemplares elecciones democráticas que enaltecen a nuestra ciudadanía” e igualmente realizó varios planteamientos al futuro Comandante en Jefe.
Los retirados señalan que confían plenamente en que “se fortalecerán aspectos capitales” en el manejo de las Fuerzas Armadas, “como el respeto al plan de carrera del personal, la no injerencia política o de factores exógenos y la prevalencia de los méritos para la selección del personal”.
Asimismo, esperan “la prosecución con la gradual modernización de armamentos, equipos e infraestructura, en la cual contribuye eficientemente la industria nacional, la estabilidad de los altos mandos para una mejor conducción, la implementación del servicio militar profesional de tropa y otros, coadyuvando en el afianzamiento de la institucionalidad y el fortalecimiento de la moral del personal”.
“FF.AA., instrumento de acción política”
Expresan que, consecuente con los planes del gobierno electo, consideran “importante la participación de las FF.AA. en su ejecución, como instrumento de acción política, por su personal, material, infraestructura y articulación en todo el territorio que le permiten una rápida capacidad de respuesta a emergencias y apoyo a planes de largo plazo”.
El foro, liderado por varios generales retirados vinculados al Gral. de Ejército (SR) Bernardino Soto Estigarribia, quien sería el próximo ministro de Defensa, manifiesta su compromiso de “acompañar al nuevo gobierno, a la vez de formular fervientes votos de fecundo éxito y un fortalecimiento creciente de las FF.AA., dentro del marco constitucional y legal”.
El grupo de opinión, que habitualmente emite pronunciamientos sobre cuestiones de interés público, es coordinado por el Gral. de Div. (SR) Luis María Sapriza, y el secretario general es el Gral. de Brig. (SR) Víctor Picaguá Araújo. Durante el gobierno del presidente Fernando Lugo, la institución castrense fue sometido a sucesivos y frecuentes cambios en los mandos, situación que mereció en su momento la crítica de Soto Estigarribia, quien quiere mayor continuidad en las jefaturas.