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El fiscal Eugenio Ocampos ordenó la captura de Rubén Moisés Galeano Cáceres, de 18 años, y Osvaldo Daniel Aquino Notario, de 30 años, por la fabricación de bombas molotov en la sede del PLRA, en la madrugada del 1 de abril, tras los disturbios y el incendio del edificio del Congreso Nacional. Igualmente, solicitó la prisión preventiva de ambos.
Galeano y Aquino están imputados por “fabricación ilícita” y “hechos conexos”, en la causa Nº 645/17 caratulada: “Brian Esteban Martínez Jara y otros s/ trasgresión de la Ley de Armas de fuego, sus piezas y componentes, municiones explosivos, accesorios y afines”.
Reconocidos
Rubén Galeano fue reconocido en el análisis de las imágenes captadas por cámaras del circuito cerrado de PLRA.
Este salió corriendo de una de las oficinas del segundo piso del edificio. En una mano sostenía una botella con un líquido.
Luego otra persona , identificada como Luis Osvaldo Sánchez González, supuesto chofer de Efraín Alegre, presidente del PLRA, lo detuvo en la escalera, tomó la botella y realizó gestos. Posteriormente dejó que Galeano continuara su marcha.
Pocos segundos después, Rubén Galeano bajó hasta el pasillo que conduce a la puerta principal de acceso al PLRA y que da a la calle Iturbe.
En otro momento, aparece Stiben Patrón (21), quien en una de sus manos llevaba una botella, que contenía un líquido, y de ella salía un trozo de tela.
Además de la imputación por la fabricación de bombas caseras, Rubén Galeano, Luis Osvaldo Sánchez y Stiben Patrón enfrentan un proceso paralelo por los disturbios y el incendio ocurridos en la sede del Congreso Nacional, en la noche del 31 de marzo.
Así también hay más de una veintena de personas que están procesadas bajo el cargo perturbación de la paz pública a raíz de las manifestaciones contra la enmienda para la reelección.
El caso Rodrigo, estancado
El caso Rodrigo Quintana sigue estancado a casi dos meses y medio del crimen que se registró en la sede del PLRA.
Por recusación a las fiscalas Raquel Fernández y Lorena Ledesma, el fiscal Aldo Cantero quedó a cargo del caso que ocurrió en los primeros minutos de la madrugada del 1 de abril, cuando agentes antidisturbios irrumpieron en la sede del PLRA.
En declaraciones a ABC Cardinal, Cantero admitió que se torna un inconveniente serio identificar al jefe policial que dio la orden de ingreso al PLRA, ya que la misma Policía no cuenta con nota de servicio sobre el referido operativo. El único imputado por el homicidio es el suboficial Gustavo Florentín.