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La Iglesia Católica viene pronunciándose sobre la necesidad de que se respeten los preceptos constitucionales en un marco en que varios sectores políticos insisten en sus maniobras para violar la ley fundamental.
Alfert sostuvo que la CEP insiste en que se debe respetar la Constitución Nacional, entendiendo que la conducción católica no es juez de nadie, ni de la Corte Suprema de Justicia y que cada uno tiene su opinión personal sobre esto. “Pero para nosotros es importante ver cómo se comprueba en este momento y en el futuro de cumplir todos los requisitos de la Constitución Nacional. De esto nomás se trata”, dijo.
“Pero nosotros lo que no podemos es juzgar cómo están actuando los diferentes estamentos, por eso no querríamos entrar en detalles, para no decir este tiene razón o este tiene razón, pero sí a nivel nacional se tiene que evaluar, para que se cumpla realmente la Constitución Nacional y muchos otros puntos”, agregó el prelado católico.
Consultado si el cumplimiento de la Carta Magna es importante para que haya paz en el país, dijo: “Si no cumplimos la Constitución, para qué lo vamos a tener”. “La Carta Magna tiene que valer para todos los momentos, para todos los casos, para toda la población. Si no se cumple la Constitución Nacional, no hay futuro para el país. Nadie va a tomar nada en serio, no se puede planificar nada, porque no hay seguridad jurídica”, enfatizó.
Subrayó finalmente que “los que interpretan la Constitución tienen que ser gente honesta y que realmente busca el bien del país”.
El presidente Horacio Cartes está recurriendo actualmente a diversos mecanismos de presión para lograr, primero, renunciar a su cargo, y, luego, intentar jurar como senador activo, algo prohibo por la ley fundamental. El artículo 189 de la Constitución ordena que “los expresidentes de la República, electos democráticamente, serán senadores vitalicios de la Nación...”. Esta contundente disposición, muchos políticos la ignoran.