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KURUSU DE HIERRO, departamento de Concepción (Arnaldo Cardozo, Raúl González y Aníbal Céspedes, enviados especiales; Omar Acosta y Aldo Rojas, corresponsales). En un recorrido de 80 kilómetros por caminos rurales de la región, entre cultivos y montes, no encontramos una barrera efectiva de policías o militares.
A pedido del colono Álcido Fick, padre del menor secuestrado Arlan Fick Bremm, y con la esperanza de que el grupo criminal Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP) lo libere pronto, la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC) se mantiene replegada desde los primeros días del plagio, que se produjo en la noche del 2 de abril último en la colonia Paso Tuyá del distrito de Azote’y, departamento de Concepción.
El repliegue de las fuerzas policiales y militares es absoluto y efectivo, por lo que los pobladores y trabajadores de la zona donde se desarrolla el secuestro del adolescente se encuentran totalmente desprotegidos ante la ausencia de los efectivos.
Este equipo periodístico hizo un recorrido de 80 kilómetros, a partir del Cruce Tacuatí (Km 364 de la Ruta III), en el departamento de San Pedro, y exploró todo el distrito de Tacuatí hasta el río Ypané. El trayecto incluyó el camino principal que cruza la localidad de Kurusu de Hierro, ya en el departamento de Concepción, pasando frente a la casa de Arlan Fick en la colonia Paso Tuyá, hasta salir nuevamente a la Ruta III en el Km 381 hasta Azote’y.
En todo ese tramo solo se encontró un grupo de policías que conversaba en una zona despoblada. De esta manera se comprobó que los caminos rurales del norte del país, que cruzan entre cultivos y montes, carecen de los más mínimos controles por la FTC.
El distrito sampedrano de Tacuatí y la localidad concepcionera de Kurusu de Hierro, además de una parte del distrito de Azote’y, son considerados de mayor influencia de los miembros del EPP, por la colaboración que reciben de sectores de la población, considerados como apoyo logístico por el Departamento Antisecuestro de Personas de la Policía Nacional.
Altas fuentes de la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC), consultadas sobre el repliegue de los efectivos policiales y militares en la zona donde opera el autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo, señalaron que la consideran una pérdida de tiempo.
Los informantes indicaron que los policías y militares solo esperan una orden superior para iniciar los operativos de búsqueda del adolescente secuestrado.
Indicaron que la instrucción de la superioridad es un eventual rescate en caso de que el cautiverio sea localizado.