Cargando...
Machuca, excomandante del Ejército durante el gobierno del Lugo, señaló que en el proyecto se quiere calcar en las FF.AA. la “tan perjudicial” experiencia para la Policía de que sus recursos estén centralizados en el Ministerio del Interior.
El exjefe militar expresó una serie de cuestionamientos al proyecto de ley de reforma de la 216 de Organización General de las FF.AA., presentado el 10 de febrero pasado al Congreso, y sostuvo, entre otras cosas, que la inclusión del Ministerio de Defensa en la cadena de mando castrense es claramente inconstitucional.
Alegó que el art. 173 de la Constitución dispone que las FF.AA. están subordinadas “a los poderes del Estado, por lo que no puede ni debe pasar a subordinarse a un órgano del Poder Ejecutivo”. “Se degradaría por sí sola”, dijo Machuca. El Gral. de Brigada retirado también citó el art. 238, numeral 9, de la Carta Magna que establece que el Presidente no puede delegar la comandancia de las FF.AA., pero que “al incluirle al ministro de Defensa entre él y el comandante de las Fuerzas Militares (FF.MM.), es una forma de delegación”.
Indicó que tampoco es posible establecer por decreto las “competencias y atribuciones” del ministro de Defensa, como expresa el proyecto, porque estas atribuciones ya están escritas en la Constitución.
Machuca habló de varias incoherencias, a su criterio, de la propuesta legislativa y mencionó, entre otras, que en los artículos 6° y 8° del documento el Ministerio de Defensa “no aparece formando parte de la composición y organización de la institución llamada FF.AA., sin embargo va a formar parte de la cadena de mando de la institución”.
Agregó que otra contradicción se da en el hecho de que el proyecto de ley le asigna al comandante de las FF.MM. “la conducción estratégica-operacional” de las FF.AA., le ordena “ejercer el mando”, para luego expresarle que todas las designaciones de los altos mandos deberá hacerlo “a través del Ministerio de Defensa””. De esta forma, se coarta totalmente al jefe de las FF.MM. en su libertad de relacionamiento con su comandante en Jefe (Presidente de la República) para escoger a sus colaboradores más inmediato, “dejando en manos de un actor eminentemente político y circunstancial dichas designaciones, que son verdaderos actos de comandos”, afirmó Machuca. Finalmente, dijo que si se llegara a promulgar el proyecto con esta disposición en cuanto a la designación de los mandos militares, el Presidente se convertirá en un “simple firmante” de lo que le proponga su ministro de Defensa.
Advierte peligro político
La inclusión del ministro de Defensa en la cadena de mando militar, “una figura eminentemente política”, contradice la intención de reducir a la mínima expresión la injerencia política en las Fuerzas Armadas, según indicó el Gral. de Brigada (SR) Alfredo Machuca. El oficial retirado coincide con otros colegas, inclusive con oficiales en actividad, en alegar que el ministro de Defensa en la estructura de mando castrense podrá generar mayor influencia política, inclusive partidaria –dependiendo de la orientación política del ministro– en el manejo de la institución militar. El argumento del peligro de la politización es nuestro bajo desarrollo institucional, según habían alegado algunos militares.