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Al ser consultado sobre el hecho de que una gran mayoría de países (26) rechazó el pedido de apenas ocho países bolivarianos de sancionar al país, dijo: “No hubo votación, eso fue una reunión, un debate político sobre la situación de Paraguay, sin duda que no hubo consenso, ni para la condena, ni para el levantamiento de ninguna sanción que cierne sobre el país”.
Agregó que mientras no haya consenso para emitir una resolución unánime de la OEA, se sostiene su tesis de “golpe de Estado”. “Cuando la OEA tenga con claridad una decisión, un pensamiento, una resolución, ese va a ser un punto importante”, hasta el momento no hay nada relevante, consideró.
También atacó la decisión asumida, tras la sesión de la OEA, de enviar una comitiva internacional para acompañar a nuestro país. “El secretario general de la OEA enviará a un hombre político de confianza para una misión, que no está determinado qué será su misión, o sea, no es ni la sesión permanente, ni el plenario el que estará la próxima semana por acá”, dijo el expresidente, quien fue destituido vía juicio político el 22 de junio pasado. Opina que la “iniciativa de Insulza no refleja lo que piensa la OEA”.