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La fiscala Sandra Quiñónez, quien hasta el 15 de enero manejará con exclusividad este caso, y el fiscal de Asuntos Internacionales Juan Emilio Oviedo, remitieron todos los datos del exintendente de Ypejhú Vilmar Acosta Marques, de su hermano Wilson Acosta Marques y de su sobrino Flavio Acosta Riveros.
Fotografías de los tres prófugos, registros de las huellas dactilares obrantes en el departamento de Identificaciones de la Policía Nacional, además de la orden de captura internacional dictada por el juez Carlos Martínez, fueron remitidos al director ejecutivo de la Policía Federal de Brasil, Rogerio Viana.
Los dos fiscales estuvieron presentes en una reunión que se realizó en Brasilia el pasado 16 de diciembre, de la cual participaron Viana y el fiscal general del Estado, Javier Díaz Verón.
En aquella ocasión, Díaz Verón señaló al alto jefe policial brasileño que manejaban informaciones de que los prófugos se encontraban escondidos en el Brasil. Indicó que podrían estar ocultos en el estado de Mato Grosso Do Sul, específicamente en la zona de Paranhos.
Viana expresó que iban a apoyar el pedido de la fiscalía paraguaya, pero que esperaba que le brinden más datos para proceder a la búsqueda de los mismos.
En aquella reunión se estableció que la fiscala Quiñónez iba a ser el contacto con la Policía Federal. La agente trabaja en esta causa con los fiscales Lorenzo Lezcano y Cristian Roig de Canindeyú, zona donde ocurrió el atentado contra Medina y Almada.
Antes de dicho encuentro con la Policía Federal, la comitiva paraguaya se reunió con el procurador general de Brasil Rodrigo Janot. Este funcionario también se comprometió en interceder ante la Policía Federal de Brasil.
A la fiscalía paraguaya le preocupa la conexión de Vilmar Acosta con Reinaldo Azambuja, el nuevo gobernador del estado de Mato Grosso Do Sul. Hay testimonios de que a Azambuja se le vio en la casa de Vilmar, así como a otros políticos brasileños. Dicho gobernador desmintió esa información.
A Pablo Medina y Antonia Almada les mataron el pasado 16 de octubre en un camino vecinal que conduce a la localidad de Villa Ygatimí, con la colonia Ko’ê Porã.
A pedido de la fiscalía, el juez Martínez dispuso la captura nacional e internacional de Vilmar Acosta Marques, como supuesto autor moral del citado doble homicidio, así como de Wilson Acosta Marques y Flavio Acosta Riveros, como autores materiales, y de Arnaldo Javier Cabrera López, como cómplice.
El único que fue detenido hasta ahora es Cabrera López, quien cayó el pasado 8 de diciembre en Canindeyú. Su detención permitió confirmar las sospechas de la implicancia del clan Acosta en el atentado contra el corresponsal de ABC en Curuguaty, quien publicaba sobre la influencia de la narcopolítica en la zona.
Hasta días después del crimen, Vilmar Acosta fue jefe comunal de Ypejhú.
En el pedido de captura internacional se menciona que los prófugos están procesados por el delito de homicidio doloso, que tiene una expectativa de pena de 5 a 20 años de cárcel.
El único apresado, Arnaldo Cabrera López, también está imputado por el mismo delito mencionado. Se encuentra recluido en la Agrupación Especializada por razones de seguridad.
Cabrera alegó que puede ser objeto de una “quema de archivo” (asesinato).
El mismo era funcionario de la comuna de Ypejhú, pues trabajaba como chofer de Vilmar.
También en Paraguay
Pese a que la fiscalía paraguaya tiene informaciones de que Vilmar Acosta Marques está en Brasil, otros informes dan cuenta de que el exintendente de Ypejhú por el Partido Colorado seguiría en nuestro país.
El trabajo de la Policía Nacional en la zona deja muchas dudas. No se observa que se realice una búsqueda ni existe una percepción de que se hace un trabajo de inteligencia al respecto.