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Una fuente muy confiable remitió a nuestro diario la fotografía del acápite del expediente sobre el homicidio del albañil Ramón Concepción Villamayor (43), quien habría sido ultimado por el político colorado de La Paloma, departamento de Canindeyú, Félix Antonio Abente.
Abente es esposo de la actual diputada colorada Cristina Villalba de Abente, conocida también como “la reina del Norte” y presunta protectora de poderosos narcotraficantes de la zona. El juez de Curuguaty, Carlos Martínez, sostuvo días atrás que la carpeta “desapareció” de la sede del Poder Judicial por supuestas presiones políticas provenientes del clan Villalba.
En una de las partes de la copia del expediente 1184/06 se puede notar claramente que el Ministerio Público, en ese entonces representado por la cuestionada agente Fanny Noemí Villamayor, había solicitado el cambio de calificación y homologación del caso ante el juez penal de garantía de aquel entonces Silvio Flores.
Esta copia a la que accedimos es una prueba clara de que el expediente se encuentra cajoneado en algún lugar del juzgado de Curuguaty.
Nuestra fuente reveló que algún funcionario estaría teniendo en su poder el expediente de la causa que quedó extinguida. Se presume también que el juez Carlos Martínez estaría utilizando como una mera excusa que el expediente se “perdió” para evitar que la opinión pública pueda conocer en detalles cómo se habría “negociado” el caso del homicidio del albañil en manos del político. Desde hace dos meses nuestro medio insiste en acceder a dicho documento.
La fuente que pudo fotografiar el expediente con su teléfono móvil tuvo temor y no se animó a revelar dónde está el documento, pero dio a entender que está en la ciudad de Curuguaty “bien guardado”. Agregó que será difícil para que la prensa, principalmente nuestro diario, pueda acceder al expediente debido a que supuestamente existe una “orden superior” de no revelar o divulgar el contenido del documento.
Testigos del homicidio
El caso de homicidio doloso quedó extinguido porque supuestamente se “demostró” que fue un homicidio culposo, a pesar de varios testigos que vieron el alevoso crimen.
Bajo amenazas se forzó el cambio de la carátula, ya que los testigos fueron advertidos de que serían exterminados si no “colaboraban” para que Abente pueda salir beneficiado en el proceso por el grave hecho. Sin embargo, esto no evitó que el presunto autor pase un buen tiempo en la cárcel de Coronel Oviedo, refieren los datos.
El albañil Ramón Concepción Villamayor (43) fue ultimado de dos certeros balazos supuestamente por el ingeniero Abente en octubre de 2005. En ese entonces integraba el equipo técnico de un proyecto de desarrollo financiado por la Itaipú.