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El hecho ocurrió alrededor de las 9:25, en el interior de una establecimiento cuyo dueño es un ciudadano de nacionalidad brasileña de nombre Carlos Enciso, que está ubicada en la colonia Kapi’i de Itakyry.
En ese momento, el capataz de la estancia, identificado como Facundo Robledo Acosta, de 54 años, quien se encontraba acompañado de su hermano Manuel Robledo Acosta. Ambos armados con escopeta calibre 12 milímetros y revólver calibre 38 milímetros. Estos recorrían los alrededores del predio ínterin en que se encontraron con varios campesinos, también armados, y que pretendían ingresar al pastizal.
Enfrentamiento
En un video que fue difundido a través de las redes sociales, principalmente Facebook y WhatsApp, se puede observar cuando Facundo Robledo se encontró con los invasores, les exigió que despejen el lugar; sin embargo, los ocupantes, que según los datos eran alrededor de 50 personas, les cerraron el paso.
Primeramente uno de ellos forcejeó con Facundo, y en un momento dado realizó un disparo contra el capataz con la escopeta que portaba. El tiro le provocó una herida en la cabeza a Robledo, por lo que este cayó al suelo. Eso fue aprovechado por los desconocidos para sacarle las armas de fuego y escapar de ahí, pero no sin antes jugarle varios tiros al rostro mientras el custodio se encontraba tendido en el pasto.
Luego, de acuerdo con los datos que se mencionan en el informe de la comisaría 12ª de Itakyry, efectivos policiales de esta localidad acudieron hasta el sitio de los hechos a bordo de una patrullera a cargo del suboficial Michel Irala. Una vez en el lugar hallaron a la víctima ensangrentada y cerca de la vía pública, rodeada por algunos vecinos.
Inmediatamente, Robledo fue auxiliado hasta el Centro de Salud de Itakyry, de donde fue derivado al Hospital Distrital de Hernandarias, donde permanece internado. El caso está a cargo de la fiscala Natalia Montanía, de Minga Porã.
Tensión constante por tierras
El conflicto entre los campesinos y los colonos brasileños viene arrastrándose desde el año 2015, cuando se inició una disputa judicial por las tierras en la zona de Itakyry.
En ese entonces los campesinos que fueron reubicados en la colonia Santa Lucía, Alto Paraná, reclamaron al Indert la entrega de tierras para sus cultivos y denunciaron la ocupación irregular de estas por parte de los brasileños, lo que inició la tensión.
En ese sentido, los encuentros violentos entre ambos bandos se darían por la posesión irregular y el uso de las tierras públicas que se encuentran en manos de los colonos brasileños y que no estarían sujetos a la reforma agraria.