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Núñez Salinas fue acusado el 18 de marzo del 2016 por contrabando y producción de documentos no auténticos y desde entonces ha postergado su audiencia preliminar con chicanas en siete oportunidades.
La última suspensión fue en julio del 2017, ocasión en que el abogado Jorge Coronel pretendió asumir su defensa y así apartar al juez del caso Humberto Otazú, con quien tiene causal de inhibición. El juez canceló su personería en atención a que no era el primero ni el único defensor, decisión apelada por la defensa.
El 28 de setiembre del año pasado, los camaristas Cristóbal Sánchez, Emiliano Rolón y Gustavo Santander ratificaron la resolución del juez Otazú. Coronel presentó entonces una aclaratoria, igualmente rechazada el 22 de noviembre del año pasado.
En teoría, con dichas resoluciones se destrabó el proceso, pero en la práctica tal cosa no ocurrió porque el expediente solo fue remitido al juzgado el lunes último. Ahora, el juzgado debe fijar nuevamente audiencia preliminar para Núñez.
Según la acusación, la firma Intercom Ingeniería SA, presidida por Núñez, despachó en el 2011 un lote de ruteadores por el que declaró US$ 17.706, pero en realidad eran decodificadores por valor de US$ 1.026.028, burlando así el pago del impuesto correspondiente.