Grosera burla a los comités de pequeños productores

Desde el primer paso para la obtención del dinero público por parte de la Federación Nacional de Productores Frutihortícola del Paraguay (Fenaprofhp) se notan gruesas irregularidades. Los pedidos no van –como correspondería– por la mesa de entrada central del Ministerio de Agricultura, sino por una dependencia del mismo. Además, fuera del horario normal.

/pf/resources/images/abc-placeholder.png?d=1993

Cargando...

Pero lo más llamativo es la fecha de la nota, muy posterior al día en que se le dio entrada tal como se demostró en la publicación de ayer.

La presentación –irregularmente hecha– se concreta enseguida con resoluciones como estas:
“Por la cual se autoriza a la Dirección General de Administración y Finanzas, la transferencia prevista en el presupuesto del ejercicio fiscal 2012, en concepto del rubro 874 ‘Aportes y subsidios a entidades sin fines de lucro’, a favor de la Federación Nacional de Productores Frutihortícolas y otros del Paraguay, por un monto total de G. 35.000.000.000 (treinta y cinco mil millones)”. Tiene fecha del 29 de noviembre de 2012, firmada por Enzo Cardozo Jiménez, ministro.

Unos días después, el 5 de diciembre de 2012, el ministro firma otra resolución, la número 1280, que transfiere 10.000 millones a la Fenaprofhp. Esta vez se echa mano a la Ley 4758/2012 “Que crea el Fondo Nacional de Inversión Pública y Desarrollo (Fonacide) y el Fondo para la Excelencia de la Educación y la Investigación…”.

Ese mismo día, 5 de diciembre, el ministro Cardozo firma otra resolución, la número 1288, por la cual se autoriza “a la Dirección General de Administración y Finanzas la transferencia prevista en el presupuesto del Ejercicio Fiscal 2012 en concepto del rubro 874 ‘Aportes y subsidios a entidades sin fines de lucro’, a favor de la Federación Nacional de Productores Frutihortícolas y Otros del Paraguay, por un monto total de G. 6.052.639.175 (guaraníes seis mil cincuenta y dos millones seiscientos treinta y nueve mil ciento setenta y cinco), conforme a la imputación…”.

El 8 de febrero de 2013, el nuevo ministro de Agricultura, Rody Godoy Martínez, firma la resolución 152 que transfiere a la Fenaprofhp G. 3.300.000.000 (tres mil trescientos millones de guaraníes).

Solo con estas transferencias –hay más, como veremos luego– que van del 29 de noviembre del año pasado, al 8 de febrero de este año la Fenaprofhp se alzó en solo tres meses con casi cincuenta y cinco mil millones de guaraníes.

Los productores se inquietan

Por alguna vía –distinta a la de Fenatrofhp– los comités que habían entregado su carpeta se enteraban del desembolso del Ministerio de Agricultura. Pasaba el tiempo y nada, o muy poco, recibían lo acordado con la intermediaria. Se acuerdan de que se les había hecho firmar pedidos como estos: fertilizantes, rollos mangueritas, bandejas de isopor, insecticidas, carpa negra, malla media sombra, motobombas, postes, pulverizadoras, alambres, pozo artesiano, cañerías, semillas de tomate, locote, etc.

Sin embargo, veían que los directivos de la Federación Nacional de Productores Frutohortícolas del Paraguay comenzaban a prosperar económicamente. Se hacían de fincas que cuentan con todos los insumos que los productores esperaban que se les diera también. Al mismo tiempo les llegaba la noticia de que el presidente de la Federación, Silvio Riveros, compraba estancias, vehículos 0 kilómetros, residencias en distintos puntos del país.

Algunas de las muchas pruebas

Estuvimos en la Compañía Cerro Rokê, distrito de Sapucai, del Departamento de Paraguarí. La belleza del lugar contrasta con la fea situación que padecen los socios del comité Yvyty Rokê. Como muchos otros productores se consideran estafados por la Fenaprofhp. “Nos engañaron, abusaron de nuestra buena fe. Hasta nos hicieron pasar por tontos”, nos dicen reiteradamente.

Sucedió que para el comité se habían aprobado los 350 millones de guaraníes solicitados. Fueron invitados el presidente y el tesorero para efectivizar el cheque en el Banco Nacional de Fomento. Así lo hicieron. Cargaron el dinero en un bolso y cuando se disponían a salir del banco se encontraron con Silvio Riveros y Lidio Irala –su segundo– que les llevaron hasta la oficina de la Federación, en Fernando de la Mora. Riveros se bajó con el bolso de dinero. Cuando le fue reclamado les contestó: “Vamos a hacer en estos días una gran reunión y allí les entregaremos el dinero”. Ya no les dio el bolso, “pero nos dio chipa y nos despidió”, nos contó el tesorero. Nunca más vieron el dinero.

alcibiades@abc.com.py

Enlance copiado
Content ...
Cargando...Cargando ...