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Habitualmente Galaverna fuma, inclusive cuando está en ejercicio de la presidencia. Durante la sesión de ayer, el senador Sánchez Guffanti le reclamó que, así como para los ciudadanos que se manifiestan se exige el estricto cumplimiento de la ley del marchódromo y la de protección al medio ambiente, él pedía también el estricto cumplimiento de la ley que prohíbe fumar en recintos cerrados y le leyó los artículos respectivos de la norma.
Galaverna no le contestó en ese momento pero, posteriormente, ocupó una banca, hizo que le traigan un cenicero, prendió un cigarrillo y comenzó a fumar, sin que ninguno de sus colegas hiciese el menor ademán de reclamo. Antes bien, algunos sonrieron por esta muestra de prepotencia y desprecio a una ley que varios de ellos sancionaron durante el anterior periodo legislativo.
El titular del Senado, en respuesta al reclamo, le restó toda importancia y dijo que la ley también prohíbe garrotear a estudiantes, en alusión a cuando Sánchez Guffanti era decano de la facultad de Ingeniería de la UNA durante el stronismo y que también había un mandamiento que dice ‘‘no matarás’’, que le pidió que transmitiese a ‘‘su jefe’’.
Galaverna no le contestó en ese momento pero, posteriormente, ocupó una banca, hizo que le traigan un cenicero, prendió un cigarrillo y comenzó a fumar, sin que ninguno de sus colegas hiciese el menor ademán de reclamo. Antes bien, algunos sonrieron por esta muestra de prepotencia y desprecio a una ley que varios de ellos sancionaron durante el anterior periodo legislativo.
El titular del Senado, en respuesta al reclamo, le restó toda importancia y dijo que la ley también prohíbe garrotear a estudiantes, en alusión a cuando Sánchez Guffanti era decano de la facultad de Ingeniería de la UNA durante el stronismo y que también había un mandamiento que dice ‘‘no matarás’’, que le pidió que transmitiese a ‘‘su jefe’’.