Cargando...
El Gral. (SR) Bernardino Soto Estigarribia, exministro de Defensa, manifestó su opinión en torno a las expresiones realizadas el viernes por el actual ministro Diógenes Martínez.
“En materia de seguridad interna, elementos de combate de las FF.AA. pueden ser empleados únicamente con la declaración de excepción y frente a situaciones de extrema gravedad, en que la Policía Nacional haya sido sobrepasada de manera manifiesta en su capacidad de controlar la situación”, dijo Soto Estigarribia.
Explicó que el presidente de la República, Horacio Cartes, como comandante en Jefe de las FF.AA. es el encargado de dar la orden para el empleo de la fuerza de combate, siempre y cuando se hayan consumados los hechos que ameriten su intervención.
“De ninguna manera pueden salir a las calles solo en base a una hipótesis, sino que después de que la hipótesis haya sido consumada, sobre hechos consumados pueden ser utilizadas las FF.AA., sin embargo, preventivamente, pueden estar bajo el concepto de apresto operacional pero dentro de los cuarteles”, sostuvo.
Respecto a la inconstitucionalidad de la intervención militar para mantener el orden público, según el artículo 173 de la Constitución Nacional, Soto Estigarribia, señaló que existe la Ley 1337 de la Defensa Nacional y Seguridad Interna, que en su artículo 56 hace referencia al punto.
Este señala que “durante la vigencia del Estado de Excepción, y frente a situaciones de extrema gravedad en que el sistema de seguridad interna prescripto en esta ley resulte manifiestamente insuficiente, el Presidente de la República podrá decidir el empleo transitorio de elementos de combate de las Fuerzas Armadas de la Nación, exclusivamente dentro del ámbito territorial definido por decreto y por el tiempo estrictamente necesario para que la Policía Nacional o, en su caso, la Prefectura General Naval, estén en condiciones de hacerse nuevamente cargo por sí solas de la situación”.
El actual ministro de Defensa, Diógenes Martínez, señaló el viernes que los militares saldrían a las calles el martes, de manera preventiva, para evitar otro marzo paraguayo. Fue tras consultársele si tenía conocimiento de un acuartelamiento, ante la marcha prevista por un sector que respalda la reelección presidencial que permita a Fernando Lugo volver a candidatarse.