Cargando...
COLONIA RÍO VERDE, departamento de San Pedro (Mabel Rehnfeldt, Arcenio Acuña y Sergio Ucedo, enviados especiales). Afligido, el padre de familia ofreció todos sus bienes, dos vacas lecheras y cinco millones de guaraníes, para salvar a su hijo mayor. El EPP pide como rescate el pago de la suma de US$ 700.000.
Durante la lectura del comunicado del grupo criminal, Abrahán Wiebe no dejó casi nunca de mirar permanentemente al piso, inclusive al responder preguntas.
Totalmente quebrado, de vez en cuando buscaba la mirada de los otros menonitas que lo acompañaron a leer el comunicado del EPP frente a la prensa.
Sus manos de trabajador se juntaron repetidas veces casi en un ruego.
Su esposa Katharina, acompañada de otras mujeres de la comunidad, aguardaban del otro lado, en otra de las habitaciones de una casita que tiene apenas dos cuartos para distribuirse sus siete miembros.
El silencio se ha apoderado del hogar. Dos loritos, dos vacas lecheras y unas gallinas corretean ajenas a la tragedia.
Oligarca, el EPP llama oligarca (forma despectiva para referirse a personas de clase social alta) a Franz que dejó la escuela para ayudar económicamente a sus padres. Que ni siquiera trabaja con su familia sino que fue a buscar trabajo con el vecino para poder ayudar en la manutención de sus cuatro hermanos menores.
Nos recibieron en un modesto cuarto que hace de sala, escritorio y dormitorio. Todo luce limpio, pero en un solo espacio se juntan la cama matrimonial, el ropero, el armario y el escritorio.
Escrito a mano
Don Abrahán no leyó el comunicado que el EPP ordenó sea leído ante la prensa. Su escaso castellano sumado a su deteriorado estado emocional trasladaron la responsabilidad sobre David Friessen, uno de los líderes comunitarios de Colonia Río Verde.
El panfleto, escrito a mano, pudo haber llamado oligarca a cualquiera que fuera secuestrado por el EPP ya que es un manuscrito donde alguien, deliberadamente, dejó espacio en blanco para llenar con el nombre de quien cayera secuestrado.
El comunicado tiene dos hojas, una de ellas con el texto que se leyó y el otro con instrucciones para la familia.
Fue traído por Pedro Peter, quien había sido tomado junto a Wiebe
Esta vuelta le trataron de oligarca a Franz Wiebe, un muchachito que cumplió 17 años el 20 de febrero pasado, el mayor de cinco hermanos que viven en una modesta casa de dos habitaciones.
Una rápida mirada en los alrededores de la casa basta para desechar el término “oligarca” adosado a esta nueva víctima del EPP.
Tan falso y tan forzado como la tinta con la que agregaron su nombre en el panfleto.
¿Qué le diría a su hijo si pudiera oírlo? preguntamos. “Quiero preguntarle qué comida va a querer que le preparemos cuando vuelva, estamos sufriendo mucho, esperamos mucho ya”.
“Nuestra familia no tiene plata, siempre estamos luchando, siempre anda pesado esto. Franz nos ayudaba, él es personal de otro, algunas veces si nos falta, ayuda acá en casa también. Queremos que cuiden a Franz, que le dejen volver pronto, le estamos esperando todos, mi señora, yo, mis otros hijos”, dijo lloroso el padre de familia.
“Queremos dar todo lo que tenemos, junté todo este tiempo 5 millones de guaraníes y quiero dar. Lo que puedo dar por el momento sos esos 5 millones, tengo un poquito de tambo, tengo un poquito de agricultura, no tengo suficiente trabajo ni para mi hijo, por eso se fue a trabajar para el vecino, para poder ganar algo y tener trabajo”.
LO MISMO DE SIEMPRE
El comunicado del EPP está redactado en manuscrito, en tinta azul, pero el nombre del adolescente raptado fue escrito en tinta negra, como si se tratase de un texto preelaborado al que le agregaron la identidad del adolescente, Franz Wiebe, de humilde familia y que fue tratado de “oligarca” por la banda.
En el escrito, el grupo exige que las mejores tierras sean devueltas a campesinos e indígenas. Agrega que han “procedido a retener al oligarca Franz Wiebe. El Tribunal Revolucionario y Popular a cargo del juez Ramiro Riquelme ha ordenado tal retención a causa de la violación de leyes revolucionarias que prohíbe la deforestación”. Finaliza diciendo que “podrá recuperar su libertad con el pago de una multa”.
Franz fue secuestrado el miércoles último, a las 17:15 en la zona de Río Verde. Estaba cosechando en la plantación de maíz y se sospecha que el verdadero blanco era su patrón, otro menonita de la zona, quien logró huir a bordo de una cosechadora. El EPP mantiene secuestrado hace más de dos años a Edelio Morínigo, humilde suboficial de Policía, y a Abrahán Fehr, otro trabajador menonita de la zona de Manitoba.