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Es habitual que en épocas de ascenso en las Fuerzas Armadas (FF.AA.) surjan críticas, pero este año los cuestionamientos se tornaron más virulentos a tal punto que el coronel de Aviación, César R. León Barrios (remesa 1984), presentó a la Justicia Militar una denuncia “por abuso de autoridad” contra el nuevo comandante de la Fuerza Aérea Paraguaya, Gral. Brig. Braulio Piris Rojas. La denuncia es porque Piris Rojas no lo incluyó en la lista de coroneles a ser promovidos y sí puso a oficiales de ese grado y remesa menos antiguos que él. León Barrios aparece en tercer lugar en la remesa 84, según el escalafón militar actualizado al que accedimos, mientras que los coroneles Ángel Tofoletti Corvalán, nombrado jefe de la Brigada Aerotransportada, y José A. Pintos Ledesma, comandante de la 1ª Brigada Aérea, aparecen en el puesto 24 y 47, respectivamente. Además, estos oficiales no tendrían los cursos de especialización que exigen las normas militares para los ascensos, según nos aseguraron. Los citados coroneles, al ser designados en la Aviación en cargos que corresponden a general, están para ser ascendidos a tal grado con acuerdo del Senado.
El Cnel. León Barrios, en su denuncia, sostiene que la designación de los nuevos comandantes, mediante orden general 229 del presidente Cartes, del 29 de octubre último, “no fue resultado del estudio técnico” establecido en el Art. 83 de la Ley 1115/97 del Estatuto del Personal Militar y el Art. 23 del Decreto 21091/03 que habla del plan de carrera. En consecuencia, el Gral. Brig Piris Rojas no tuvo en cuenta los legajos personales de los oficiales, alega León Barrios.
Según fuentes militares, para la designación de los coroneles Tofoletti Corvalán y Pintos Ledesma hubo injerencias de la presidenta del Partido Colorado, senadora Lilian Samaniego, y del asesor político de la Presidencia, Darío Filártiga. Supuestamente, las esposas de estos oficiales superiores son del equipo político de Samaniego. No es la primera vez que se menciona el nombre de la política oficialista en relación a cuestiones de las FF.AA. En una ocasión anterior, supuestamente Samaniego protegió a un militar que agredió al jefe de la Artillería. Intentamos tener la versión ayer de la senadora, pero no fue posible.
Otro punto de críticas en las FF.AA. es el nombramiento en jefaturas de oficiales con antecedentes de corrupción. Está el caso del nuevo jefe de la Armada, contralmirante Antonio W. Vallejos Abadíe, que fue procesado por venta ilegal de gasoíl descubierto en Pilar en el 2006. El nuevo prefecto general naval, Cap. de Navío Carlos D. Velázquez Moreno, cuando era jefe del departamento técnico de la Prefectura firmó documentos para avalar la presunta construcción de nueve barcazas, luego reclamadas como robadas por una naviera.