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Visiblemente dolida, la mujer indicó a ABC Color que hubo gente que en los últimos días intentó enlodar a toda su familia, cuando que ellos están siendo afectados también por la situación.
“Nosotros somos víctimas. No se juega con los muertos”, aseveró.
Otro hijo policía
La mujer confirmó que su hijo mayor, Orlando Javier Ortega Molinas, es efectivo de la Policía, aunque descartó que el mismo pudiera tener relación alguna con la venta de los documentos de su hermano.
“Hablé con él y me dijo ‘que investiguen lo que quieran mamá, yo tengo la conciencia tranquila. Él no tuvo nada que ver”, afirmó la señora.
Recordó que su hijo Walter falleció luego de ser atropellado y abandonado en la calle en la noche del 24 de noviembre de 2002.
El caso terminó impune debido a falencias en el trabajo del Ministerio Público.
“Se hizo una injusticia tan grande con él, aquella vez. Me entregaron su cuerpo después de tres días, ya todo agusanado prácticamente porque estaba como NN y la morgue estaba con problemas. Y ahora le están haciendo esto”, dijo con la voz entrecortada.
Como viuda de un comisario retirado de la Policía, dijo sentirse todavía más dolida al saber que efectivos de la fuerza del orden en la que sirvió su marido estén involucrados en la usurpación de la identidad de su hijo. “Me duele en el alma”, sentenció.
Dijo esperar que la fiscal Sandra Quiñónez realice un buen trabajo en la investigación del caso y que no se repita la impunidad que se dio con la trágica muerte de su hijo hace ya casi 14 años.