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Suman las evidencias de las conexiones de traficantes de drogas con políticos.
El diputado suplente por la ANR Carlos Rubén Sánchez Garcete, alias “Chicharõ”, cayó preso el 7 de setiembre de 2013 en Capitán Bado en una operación de agentes de la Secretaría Nacional Antidrogas. Su captura se materializó a raíz de una condena de cuatro años de prisión que tiene en Brasil por lavado de dinero y ocultación de bienes.
Según los registros, durante su reclusión en la Penitenciaría Nacional de Tacumbú, el convicto de manera muy sospechosa fue visitado en varias ocasiones por los diputados colorados Freddy D’Ecclesiis y Marcial Lezcano. “Chicharõ” precisamente es diputado suplente de este último legislador.
Uno de los registros indica que el 12 de agosto pasado, D’Ecclesiis fue a la cárcel de Tacumbú para visitar a Sánchez. Posteriormente, el 11 de setiembre último nuevamente acudió a la prisión junto al presunto narco, quien días después fue liberado. El diputado Lezcano también fue a ver a “Chicharõ” en varias ocasiones, y al menos dos veces en los últimos tiempos. Una de las visitas fue el 13 de agosto pasado, al día siguiente de una de las reuniones de D’Ecclesiis con el convicto.
Llama la atención que los dos parlamentarios cuestionados por supuestamente brindar protección a narcotraficantes hayan visitado en reiteradas ocasiones a Carlos Rubén Sánchez, uno de los considerados responsables del comercio de drogas en la frontera, según el Brasil.
La Policía y la Senad aseguran que Carlos Rubén Sánchez es el principal operador en nuestro país de la organización dirigida por el narcotraficante Luis Carlos Da Rocha, alias “Cabeza Branca”.
Por su parte, el diputado D’Ecclesiis fue acusado por su propia colega y correligionaria Perla de Vázquez de estar conectado al narcotráfico. Marcial Lezcano es hermano del narcopolicía pedrojuanino Águedo Ronaldo Lezcano Paredes, detenido con dos litros de cocaína líquida en Capiatá el 5 de marzo de 2013 y liberado sugestivamente en octubre de ese año.
“Chicharõ” recuperó la libertad en setiembre último, tras el desistimiento de la extradición por la justicia brasileña. Sin embargo, los antidrogas consideran que fue una maniobra jurídica para dejarlo libre.
En la noche de ayer nos comunicamos con el diputado Freddy D’Ecclesiis (ANR) para obtener su versión. Reconoció que fue un par de veces a la cárcel de Tacumbú, pero no para visitar a Carlos “Chicharõ” Sánchez, sino fue a ver a un compueblano que cumple una condena y que se dedica al forrado de termos.
“No me fui junto a esta persona que decís (Chicharõ), fui a visitar a un amigo que es mi compueblano y que hace forros de termo. Le hice pedidos para los jugadores de la selección de Santaní, que cerró un año muy bueno. Seguro que la gente me vio ahí y después ya especulan. Estamos siendo víctimas de ataques constantes”, señaló ayer el legislador.