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Vega se ratificó en sus declaraciones a ABC Color y agregó nuevos datos. Dijo que la propiedad de 4.000 Ha. en el Chaco que posee su exjefe, el director administrativo del Poder Judicial, Gustavo Chamorro, es una “estancia cinco estrellas”.
“Allí hay vacas, caballos, otros animales, un tajamar. Hay una infraestructura moderna”, indicó.
El exchofer de la Corte fue entrevistado ayer por diferentes medios de comunicación y fue revelando más detalles de su vínculo con Chamorro. “No solamente me iba yo a la estancia, también los albañiles, pintores y carpinteros que estábamos a su cargo viajábamos al Chaco para hacer los trabajos de plantar pasto, alambrar, llevar ladrillos.
Incluso nos quedábamos hasta quince días a trabajar allá”, relató.
El propio Chamorro confesó que cuando adquirió la propiedad la puso a nombre de Vega, quien se desempeñaba como su asistente personal, supuestamente para hacer la partición del inmueble con otra propietaria.
El exchofer cuenta además que percibía un salario de G. 2 millones como contratado de la Corte, pero que no le renovaron el contrato cuando se negó a sacar un préstamo del Fondo Ganadero de G. 400 millones que le habría pedido Chamorro.
Protegido de Fretes
El administrador del Poder Judicial es conocido como el protegido del ministro de la Corte Antonio Fretes. El alto magistrado fue quien lo llevó a la Corte en el cargo que ocupa actualmente.
Ambos se conocieron cuando trabajaban en el ex-IBR. En una de las presidencias de Víctor Núñez, este lo llegó a separar del cargo, pero cuando Fretes volvió a la presidencia lo repuso y sobrevivió además a las administraciones de Raúl Torres Kirmser, Alicia Pucheta y Luis María Benítez Riera.
Lo llamativo es que Chamorro percibe un salario de G. 8 millones por mes, sin embargo, logró adquirir una propiedad de 4.000 Ha. en el Chaco, además en el año 2009 compró una camioneta Hummer por US$ 40.000, cuyo pago lo hizo al contado.
El mismo Óscar Vega, quien era chofer de Chamorro, afirma que la referida camioneta lo llevó para ser reparada al taller Toyocar, donde se reparan todos los vehículos de la Corte y que desde hace siete años gana las licitaciones para este efecto.
Por las manos de Chamorro pasan todas las compras y licitaciones que se realizan en el Poder Judicial, además ejerce una fuerte influencia sobre los demás magistrados, ya que es él quien autoriza el pago de los viáticos, horas extras y otorga los vales de combustibles.