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El agente fiscal Joel Cazal manifestó que el apresamiento de Meza es el resultado de una investigación de varios meses. Agregó que poseen información sólida que demuestra que Meza participó activamente en una parte del operativo del plagio del joven Franz.
Según los investigadores, el mencionado sexagenario custodiaba al citado secuestrado y cocinaba para él en el primer campamento donde lo tenían cautivo. Luego asumió el rol de logística y prestó servicio de inteligencia de la organización criminal, señaló el fiscal Cazal.
A pesar de que aún no se realizó la diligencia de reconocimiento de persona, Meza está plenamente identificado por la Fiscalía como integrante del grupo criminal EPP, y fue imputado por supuestamente cometer privación ilegítima de libertad, secuestro, extorsión, extorsión agravada, terrorismo y asociación terrorista en grado de autoría, por los fiscales Cazal, Alberto Torres y Federico Delfino.
Meza fue capturado en una vivienda precaria ubicada en un asentamiento cerca de Curuguaty, Canindeyú, en la madrugada de ayer, y no opuso resistencia a las fuerzas del orden. “Hacía meses que le estábamos haciendo el seguimiento. Hay otros indicios sobre otras personas que también van a ser aprehendidas por estar vinculadas a estos delitos, pero aún no podemos revelar más información”, indicó Cazal en la conferencia.
El agente señaló que del poder de Meza fueron incautados algunos escritos y panfletos dirigidos contra el Gobierno, que serán analizados. El Laboratorio Forense hará un análisis de comparación de voz del audio de la prueba de vida entregado en su momento por el EPP, en el que supuestamente habló Meza.
De la conferencia de prensa también participaron el fiscal general del Estado Javier Díaz Verón, quien valoró el logro de los órganos del Gobierno, del viceministro del Interior Ariel Martínez, del comisario Gilberto Fleitas, entre otros.
El menonita Franz Wiebe Boschman, quien en aquel entonces tenía 17 años, fue secuestrado por el EPP el 27 de julio de 2016 mientras trabajaba en una chacra cerca de la estancia La Yeya, en el distrito de Santa Rosa del Aguaray, departamento de San Pedro.
El joven fue liberado el 25 de febrero de este año. Repentinamente apareció aquel día en el casco central de la estancia Toroveve, a solo tres kilómetros del punto donde había sido capturado siete meses antes. El EPP reconoció haberse equivocado de objetivo y liberó al secuestrado sin el pago del dinero que pidió.