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Amarilla confiesa que unió al empresario Chamorro con la empresaria, que lo molestaron de una reunión donde analizaba las reformas impositivas y se lo escucha ordenando que se cumplan los pactos. “Mi presencia aquí es porque yo le conozco a María Luz (Peña) desde hace quince años atrás”, dice el senador Amarilla en el video y Peña le corrige: “Veinte años”. “Sí, 20 años. Entonces mi apuesta es a que la gente de trabajo se conozca entre sí, así nomás es. Y él (Óscar Chamorro) fue mi partner en la época de facultad y me dice, la puta, estoy desesperado, se me cae el contrato en Tigo, ayudame con tu amigo. Le llamé también y me dice “no”, tiene que solucionar lo mediático o sino le cortamos”. Imperativo, el senador da cátedra a todas las partes presentes. “Ya ustedes quedan con línea directa ya, crucen teléfono”, ordena. Y más adelante dice: “Lo único que te voy a pedir, Óscar (Chamorro) es lo siguiente: Nosotros nos conocemos hace 20 años, también con María Luz. Lo que se pacte, se cumple”. Chamorro: “Así es”.
El senador Dionisio Amarilla continúa y baja más línea ante todos: “Así nomás. Lo que se pacte, se cumple. Porque yo soy una persona que lo único que tengo de valioso es mi palabra. Donde voy, y la gente me conoció ya y golpeo la puerta me abren, porque anunció este y va a cumplir. Así que les pido que lo que pacten...” María Luz Peña: “Y ahí queda. Entre nosotros y se acabó”.
El senador Amarilla agrega más adelante: “Ustedes se encuentran mañana y afinan todo lo que tienen que afinar, le hacemos trabajar”. Sigue: “Acá, reitero, no me gustaría que a futuro después me digan, puta, me jodió fulano”. Y en el punto más álgido de su intervención, añade con voz de mando y hasta fastidio: “Porque ya... Imaginate, ahora dejé mi casa, estaba estudiando la reforma impositiva, para, porque un amigo se fue a golpear la puerta, quiero que salgan bien de este tema...” (sic). Unos minutos más adelante se despide de todos los presentes con un “mucho gusto, gracias por todo”.