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En todo este tiempo estaban actuando tratando de dar la imagen de que se abrían a las demandas ciudadanas de permitir que los electores puedan elegir y no votar simplemente en el sentido de que los candidatos surjan como productos de sus decisiones y no de las componendas entre algunos líderes políticos.
La ciudadanía tuvo sus momentos de alta presión y logró que por lo menos se desbloquearan parcialmente las listas cerradas y completas de candidatos. Pero los políticos aprovecharon los momentos débiles de la presión, de la guardia baja, para contraatacar y enviar al canasto la idea del desbloqueo.
La verdad es que los partidos políticos no están preparados para una elección directa de los candidatos a cargos electivos, sin la intervención digitada de los caudillos, por ende no están dispuestos a ceder a la presión ciudadana de que los electores voten a personas, no a listas, como se hace actualmente y al hacerlo de esa forma “eligen” a personas indeseables que se esconden en las listas detrás de los pocos que conservan algún tipo de prestigio.
El desbloqueo de las listas sábana es un disparo al corazón del problema político del país. La pésima calidad de la representación política que da como resultado una mala calidad de la democracia. El desenlace es conocido: mala gestión en todos los poderes del Estado y la consecuente repercusión en la calidad de vida de la población, además de la pobre calificación de nuestro país en el concierto internacional.
Aprovecharon el debilitamiento de la movilización ciudadana en contra de las listas sábana para poner punto final al tira y afloje entre los tomadores de decisiones con el aplazamiento de la ley aprobada a regañadientes. Entre el Poder Legislativo, la Justicia Electoral y el Poder Ejecutivo acordaron tirar al tacho la pequeña conquista ciudadana para que en las próximas elecciones generales ellos puedan ubicar otra vez sin inconveniente alguno a los amigos impresentables.
Esta debe ser la peor inversión que realizan los partidos políticos en su misión de buscar el poder.
Podrán ocultar a los impresentables por algún tiempo, pero hay un sector de la población que ya no está dispuesta a acompañar este sistema de representación de concejales, diputados y senadores que están ahí sin siquiera abrir la boca durante cinco, diez, quince y más años.
El desbloqueo o elección de persona a persona no es el mejor método porque en materia electoral está comprobado que no existe el mejor sistema, pero esta forma de listas sábana está agotado y dejó de ser una manera eficiente de complicidad, ocultamiento e impunidad entre los caudillos. Todo lo contrario, se está convirtiendo en el cáncer de los partidos, que tendrá graves consecuencias en el futuro de estas instituciones.
Depende de los líderes de hoy, en especial de los líderes de partidos políticos tradicionales, tener la visión y la inteligencia suficientes para advertir esta situación y limpiar cuanto antes sus partidos de los agentes contaminantes que los envenenan.
Todavía hay tiempo de rectificar las medidas equivocadas que se tomaron con respecto a las listas de candidatos. Todavía es posible escuchar la voz del pueblo y actuar en consecuencia. La ciudadanía ya dio su voz de alerta, y si lo hizo es porque volverá sobre el punto más tarde o más temprano.
ebritez@abc.com.py