El edil independiente Miguel Prieto afirmó que “evidentemente hay un incumplimiento de contrato o una sobrefacturación abismal”. En la institución educativa también faltan pupitres y hay aulas donde ningún alumno tiene dónde sentarse.
Además de Prieto, fueron hasta dicha escuela los concejales Herminio Corvalán (Tekojoja) y Celso “Kelembu” Miranda (independiente), quienes conversaron con el vicedirector de la institución, Seferino Orrego.
Por falta de un lugar adecuado, las mesas y sillas para servir el almuerzo son ubicadas en los pasillos de la escuela, donde comen 320 niños desde preescolar al sexto grado, del total de 520 alumnos que tiene el local.
Tanto los niños como los padres dijeron a los ediles que el año pasado solo en dos o tres ocasiones recibieron fruta de postre. También aseguraron que comieron pescado, por primera vez, el miércoles de la semana pasada. Esto luego de que el edil Celso Miranda denunciara que la tilapia anunciada en el contrato como menú no llegaba a alumnos.
“Ese alfajor estoy buscando en el contrato y no está. Debía haber sido fruta el postre. Fruta y ensalada de frutas, figura. También me llama la atención la cantidad que se sirve. Me parece muy poco. G. 15.700 estamos pagando, eso le cuesta al Estado paraguayo cada plato y creo que con esa cantidad –servida– no alcanza los G. 4.000. Considero que el costo es demasiado elevado para el volumen de la ración. Acá evidentemente hay un incumplimiento del contrato o una sobrefacturación abismal”, expresó el edil Prieto.
La empresa que ganó el año pasado la licitación llamada para servir el almuerzo es Joayu SA, de María Zulia Talavera de Fernández. El contrato plurianual es de G. 10.343.788.000 por un total máximo de 658.840 raciones.