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El director del Hospital de Clínicas, Jorge Giubi, recibió en su oficina a nuestro equipo periodístico el pasado viernes y cuando fue cuestionado sobre la presencia de alimañas no solo en la cocina sino en todo el hospital exponiendo a los delicados pacientes internados a las numerosas enfermedades que estas ratas pueden transmitir, el director respondió diciendo “esta gente viene al hospital porque ya está enferma luego”.
Con esas declaraciones dio a entender que a pesar del ambiente insalubre, la comida no corre riesgo y que si se complica el cuadro clínico de los pacientes tras haber ingresado al nosocomio no podría ser por culpa de las ratas y la deficiente higiene del recinto.
Se justificó diciendo que por culpa de la intervención que se realizó en Clínicas hubo un periodo administrativo en el que no se firmaba ningún documento y por tal motivo no se contrata el servicio de ninguna empresa dedicada al rubro de exterminio de plagas o desratización.
Giubi detalló que la última vez que se realizó una desinfección de la cocina fue en agosto del año pasado. Desde entonces las ratas y cucarachas fueron ganando terreno, tomando primero la cocina en donde se reproducían, para luego dar paso a los ratones y las lauchitas a tomar las demás dependencias de este nosocomio.
Los funcionarios de Clínicas incluso trajeron varios gatos para que “acaben” con las gigantes ratas, pero huyeron despavoridos porque ellos solo persiguen ratones y lauchas. Posteriormente los funcionarios no tuvieron otra opción que recurrir a los venenos, pero no hicieron efecto, y tampoco contaron con la astucia de las ratas, que lejos de caer atrapadas y morir en las trampas, robaban los cebos y las porciones con que se buscaba atraerlas a la muerte.
La limpieza del hospital está a cargo de una empresa tercerizada, Renova SA, que se encarga de limpiar el piso de la cocina y los sanitarios.
En la cocina de Clínicas trabajan cuatro cocineros en dos turnos de 8 horas. Dos realizan la cocción de los alimentos para unos 300 pacientes internados y otros dos para los funcionarios.
Presupuesto
El hospital de Clínicas es dependiente de la Universidad Nacional de Asunción y su presupuesto es de G. 78 millones de dólares al año. El nosocomio hoy no cuenta con insumos hospitalarios. En cuanto a medicamentos, los faltantes son antibióticos, diuréticos como furosemida y adrenalinas, entre otros.
Los alimentos son otra gran carencia.