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El profesor español no solo acosó a nuestras compatriotas sino a otras becarias mexicanas, según la denuncia. Estas presentaron como pruebas los mensajes de WhatsApp en los que el catedrático les exigía “salir”, y luego en la universidad (como no obtuvo consentimiento de las víctimas) las empezó a menospreciar y decirles “burras y bobas” en clase.
El director de Becal, Federico Mora, y el ministro de Educación, Enrique Riera, destacaron la valentía y el coraje de las becarias para denunciar el hecho y que la Universidad Complutense ha pedido disculpas y activado un estricto protocolo apartando al catedrático de las aulas; sin embargo, aún permanece en su oficina, hasta tanto culmine la investigación prevista a finales de este mes.
Mora indicó que por el momento no se sabrá el nombre del docente acusado de acoso o de las becarias, ya que estas prefieren esperar que avance la investigación y salvaguardar la maestría.
Este no es el único caso que salpica a universidades de España. En Sevilla se ha condenado a siete años de cárcel a un catedrático de la Universidad de Sevilla, Santiago Romero, por abusar sexualmente de tres profesoras entre 2006 y 2010, y en la Universidad de Barcelona hay indignación porque no se puede procesar al catedrático Jesús de Miguel porque las acusaciones de acoso sexual a alumnos y alumnas prescribieron.