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El presidente Cartes llegó ayer a París. Esta mañana abrirá el plenario de Jefes de Estado, a las 8:00, y hablará sobre la capacidad que tiene nuestro país de generar energía limpia a través de las hidroeléctricas.
La comitiva oficial que acompaña a Cartes está integrada por 14 personas, entre ellas los directores de Itaipú y Yacyretá, James Spalding y Juan Schmalko, respectivamente.
La COP-21 se desarrollará durante dos semanas, y se espera que el 12 de diciembre se tenga un documento final, un nuevo acuerdo en beneficio del ambiente del planeta, de cumplimiento obligatorio para todos los países respecto al control y reducción de sus emisiones de gases de efecto invernadero.
Más “sucia” que limpia
La delegación paraguaya presentará en París documentos en los que se resalta la alta generación de energía “limpia” per cápita, como la hidroeléctrica.
Sin embargo, no se resalta que esa generación de energía “limpia” en realidad es en mayor parte para Brasil y Argentina.
La matriz energética de Paraguay es, en realidad, bastante sucia: apenas 17% es hidroeléctrica; 44% es leña (biomasa, sucia) y 38%, petróleo (muy sucia).
Además, Paraguay ocupa el sexto lugar entre los mayores deforestadores del mundo, conforme con un reporte de la FAO.
Según datos de la Secretaría del Ambiente (Seam), el uso de biomasa como energía ya estaría rondando incluso el 49,5%. Esto implica que la mitad de la energía de Paraguay, a pesar de Itaipú y Yacyretá, sigue proviniendo de la leña.
Para algunos técnicos en el sector Cartes no puede seguir presentando a Itaipú o Yacyretá como la panacea, si ni siquiera es nuestro lo que produce.
Concentración juvenil
En coincidencia con varios países del mundo, ayer se realizó una concentración juvenil ambiental en la Costanera, pese a la inclemencia del tiempo.
Esta actividad simultánea fue para hacer un llamado a las autoridades nacionales reunidas en París, en el marco de la COP-21, para que adopten medidas y firmen acuerdos realizables en favor del planeta.
La actividad de ayer en la Costanera fue liderada por la organización no gubernamental Reforestemos Paraguay (Refopar), y en la ocasión se recordó de nuevo la defensa del Cerro León y la necesidad de preservar lo poco que queda del cerro Ñemby.
Los jóvenes reclamaron que se pare la destrucción de los cauces hídricos, se evite la quema de basura y pastizales, se impida eficazmente la deforestación y se dé solución definitiva al problema de la basura, entre otros reclamos.