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Riera agregó que no se puede obligar a los padres a responder el cuestionario y dijo que en Capital, Central y otras partes del país más del 50% de los encuestados ya respondieron.
“Esta información que se solicita no tiene ninguna otra utilidad más que el diseño de políticas educativas y beneficios sociales para el estudiante”. El ministro reiteró que estos datos van a estar encriptados y no van a ser accesibles para el resto.
Además, descartó el rumor de que los datos se podrían utilizar con fines políticos. “Desde que se creó el cuarto oscuro no hay forma de inducir al voto y a través del RUE menos ”, apuntó.