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Miles de jóvenes de todas las diócesis del país participaron ayer de la peregrinación y de la misa que tuvo lugar en Caacupé. Los creyentes se congregaron desde tempranas horas en el Campamento Tape Pyahu (Ypacaraí Ruta II, Km 47), donde tuvieron una jornada espiritual y de animación musical.
Se los vio muy bulliciosos: cantando y bailando al son de músicas interpretadas por grupos cristianos.
Aproximadamente a las 16:00, comenzaron a caminar hacia la basílica, donde el obispo asesor Mons. Pedro Jubinville presidió la misa. Al término de la celebración, la Pastoral Juvenil Nacional dio a conocer un manifiesto que fue elaborado por jóvenes de las diócesis.
El documento de los jóvenes contiene duros cuestionamientos a la clase política, especialmente a los parlamentarios, intendentes y gobernadores. “Denunciamos la corrupción imperante en las instituciones públicas, especialmente en el Congreso, en las municipalidades y las gobernaciones. Es vergonzoso ver cómo los políticos de turno se enriquecen y despilfarran los recursos del pueblo mientras que los hospitales carecen de medicamentos, incluso muchos de nuestros compatriotas mueren camino a la capital o esperando una atención en los pasillos”, señala en otra parte el manifiesto.
Piden a los gobernantes acompañar el clamor y el sentir de la gente, que no se retroceda ni un milímetro en la lucha contra la corrupción y la impunidad, que las malas prácticas como el tráfico de influencias, los pagos de favores con cargos públicos y los negociados que roban tan impunemente nuestros recursos sean desterrados del país. “Necesitamos que todas las instituciones obren con transparencia y patriotismo. Nuestro Paraguay reclama cambio”, afirman.
Al mismo tiempo, alientan a las autoridades a que sean patriotas, a los “que verdaderamente representan al pueblo y van a contracorriente luchando por la construcción de un mejor Paraguay”.
Los jóvenes también aprovecharon la ocasión para reclamar empleo digno con salario justo, solo así cesará la migración juvenil en busca de un futuro mejor. “Pedimos que los cargos públicos ya no sean distribuidos entre los amigos, parientes y partidarios, sino que se tenga en cuenta solamente la idoneidad para el acceso a los mismos”, exigieron.
En el manifiesto, lamentan igualmente el incremento del narcotráfico, la violencia, la inseguridad reinante en las calles, los grupos armados, la corrupción en las instituciones encargadas de velar por nuestra seguridad y el deterioro de la administración de la justicia. “Nos lastima ver que la justicia es cómplice de grandes violaciones, beneficiando a personas y grupos que cuentan con influencias económicas y políticas, marginando a los sectores más vulnerables. Queremos y necesitamos una mayor seguridad y una justicia que sea verdaderamente independiente, pronta y barata para todos”, piden.
Los jóvenes también se manifestaron a favor de la familia, basada en la unión entre la mujer y el varón, y la defensa de la vida desde su concepción y hasta su muerte natural.
Los participantes de la peregrinación llaman a sus coetáneos a ser protagonistas de este tiempo, “queremos jóvenes valientes que entren en la cancha y jueguen limpio, dándolo todo por un país mejor, jóvenes que no se queden callados ante las injusticias, que no sean cómplices de las irregularidades, que expresen lo que les inquieta y afecta, que participen activa y permanentemente sirviendo a la patria y a su comunidad”.