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Desde el miércoles 28 de noviembre hasta ayer después del mediodía fueron atendidas más de 17.000 personas en los distintos puestos médicos instalados en el marco del Operativo Caacupé 2018. Afortunadamente, no se registraron casos de alta complejidad, informó el Ministerio de Salud.
El Dr. David Cardozo, director del Servicio de Emergencias Médicas Extrahospitalarias (Seme) registraron 44 traslados en ambulancia desde un puesto sanitario hasta el Hospital Regional de Caacupé. El funcionario destacó que no hubo registros de personas que hayan requerido atención de alta complejidad o que necesitaran el traslado hasta un hospital especializado.
Las consultas más frecuentes fueron por dolores de cabeza, descompensación por presión alta, ampollas y dolores físicos.
Uno de los casos destacados por los representantes del Ministerio de Salud fue el de una bebé de 30 días que tuvo que ser derivada de urgencia al Hospital de Caacupé. La pequeña fue llevada por su madre y tuvo una complicación respiratoria a raíz de una gripe. “Pese a las recomendaciones de no traer niños, la gente sigue ignorando este pedido. Nosotros seguiremos pidiendo esto cada año, esperando que exista conciencia. Los pequeños se deshidratan más rápido y algunos que ya salen de sus casas con gripe o fiebre por el camino empeoran”, señaló el Dr. Juan Carlos Portillo, director general de Servicios de Salud del Ministerio.
Caos en el tránsito
Varios automovilistas que ya retornaban desde Caacupé hacia Asunción se quejaron por el gran embotellamiento que se generó desde el cerro Caacupé hasta la zona de Pedrozo. La fila de vehículos se extendió por más de tres kilómetros.
Un cuello de botella se inició sobre la Ruta 2, Mariscal Estigarribia, aproximadamente en el kilómetro 48, zona del cerro, y se extendió hasta el kilómetro 45, en Pedrozo. En esta última intersección se estaba realizando el desvío de colectivos, que van por un tramo que sale a la ruta San Bernardino-Luque, lo que generó la cola vehicular.
Los agentes de la Patrulla Caminera formaron su puesto en el kilómetro 47, pero no ayudaban a agilizar la circulación de los rodados. A partir del kilómetro 45, el tránsito volvió a ser fluido.