Informe del BID propone priorizar la educación de la primera infancia

Un informe del BID plasmado en el libro “Los primeros años” señala que las políticas públicas deberían mejorar las vidas de los niños desde el momento de su concepción hasta mucho después de que hayan comenzado la escuela.

Cargando...

El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) emitió su informe anual sobre el desarrollo de las Américas. Este año el estudio trata sobre la importancia del desarrollo infantil temprano en el libro titulado, “Los primero años / El bienestar infantil y el papel de las políticas públicas”.

En el informe se recomienda priorizar la inversión en los niños pequeños de 0 a 5 años. El estudio muestra que las intervenciones con visitas a los hogares produjeron un efecto promedio sobre las capacidades cognitivas de los niños alrededor de 10 veces superior a los programas que se desarrollan en los centros infantiles. Además, señala que se producen mayores resultados cuando la inversión se enfoca en niños de los sectores en mayor riesgo.

Madres educadas

El libro destaca la influencia del nivel de educación de las madres en el crecimiento y desarrollo del niño. A menor educación de la madre se registra mayor índice de mortalidad infantil, mayor desnutrición; menor crecimiento, peor salud y dificultades cognitivas que entorpecen las capacidades analíticas de los niños y su desarrollo.

“Los hijos de madres con bajo nivel educativo reconocen menos de la mitad de las palabras que los niños cuyas madres han alcanzado un mayor grado de instrucción”, dice el informe.

Por otra parte, destaca que gracias a la intervención pública, la pobreza de los niños pequeños de la región ha disminuido bruscamente durante la última década. “En términos generales, hay dos argumentos que justifican la intervención pública: las fallas en la toma de decisiones a nivel del hogar y las fallas en diversos mercados que prestan servicios para los pequeños”, indica el estudio.

El gasto en los servicios y programas para la niñez temprana representa menos del 6 por ciento del gasto social total, que incluye educación, salud, vivienda y protección social. Medido en términos de porcentaje del PIB, América Latina y el Caribe gasta aproximadamente la mitad del promedio de los países de la OCDE en preprimaria y centros de cuidado infantil.

Por ello se propone un cambio en las prioridades de las políticas públicas, e intervenir en la educación y concienciación de los padres velando por el niño desde su concepción.

Enlance copiado
Content ...
Cargando...Cargando ...