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El caso acaparó titulares y fue noticia en todos los medios. Personal de blanco del Instituto de Previsión Social (IPS), en una cantidad de 53 funcionarios, eran sospechados de haber obtenido sus títulos de licenciados en Farmacia y Química de la Universidad Privada del Guairá (UPG) de manera fraudulenta, sin cumplir con la malla curricular de dicha carrera. Posteriormente, el número de sospechosos aumentaría a 69.
La denuncia, concretamente, señalaba que más de medio centenar de empleados de la previsional consiguieron ser licenciados en tiempo récord de uno a dos años como máximo.
Por otro lado, se mencionó que la misma Universidad Privada del Guairá no estaba habilitada por la Agencia Nacional de Evaluación y Acreditación de la Educación Superior (Aneaes), por lo que los títulos otorgados por dicha institución no pueden ser aceptados por el IPS para cargos profesionales.
El caso se asemeja bastante al del Instituto Santa Librada que fue clausurado por detectarse la venta de títulos para licenciaturas en enfermería.
Sueño de los justos
A seis meses de la grave denuncia, el caso sigue “durmiendo el sueño de los justos”, ya que prácticamente no se ha avanzado en la investigación.
La Dirección Jurídica del Instituto de Previsión Social, en aquel entonces a cargo de Carolina Llanes, tomó el caso e inició una investigación a más de 50 funcionarios, entre ellos personal con títulos de licenciatura en Farmacia y Química acusados de supuestamente comprar los títulos universitarios de la Universidad Privada del Guairá.
Sin embargo, hasta ahora ni siquiera se conoce la apertura de un sumario administrativo a los funcionarios que están sospechados de haber comprado títulos.
Silencio cómplice
En realidad, en el Instituto de Previsión Social (IPS), el caso de los presuntos títulos falsos es un tema que se maneja herméticamente.
De hecho, casualmente la nueva jefa de Auditoría del ente previsional, Alma de Acosta, resulta ser esposa de Derlis Acosta, docente de la Universidad Privada del Guairá.
Por todos estos antecedentes, se sospecha fuertemente de que el caso sea cajoneado y que, una vez más, vaya al “oparei”.
Premios en vez de sanciones
Lejos de continuar con las investigaciones y sancionar a los involucrados en la supuesta compra de títulos falsos de la Universidad Privada del Guairá (UPG), la mayoría de los egresados de esta institución que son funcionarios del Instituto de Previsión Social (IPS) fueron recategorizados utilizando justamente los títulos de origen presuntamente apócrifos. De acuerdo a fuentes de la previsional que pidieron guardar su identidad por temor a represalias, el caso de la Universidad Privada del Guairá estaría muy fuertemente arraigada en la misma directiva del IPS e inclusive entre autoridades del propio Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social (MSPyBS), a cargo del Dr. Antonio Barrios.