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La cetrería es el arte de cazar con aves rapaces. Esta modalidad tiene varios adeptos en Paraguay y, en lugar de dejar la crianza de las aves como un hobby, formaron la Asociación Paraguaya de Cetrería y Conservación de Aves Rapaces (APCCAR).
Como gremio, sus miembros realizaron ayer el primer evento de cetrería que recibió a varias familias. En la ocasión, no solo tuvieron la dicha de ver a estas aves volar, sino que también pudieron tomarse fotografías y cargarlas, siempre con el guante que sirve de soporte para que los animales posen sus garras.
Jesús Ortega, miembro de la asociación, explicó a ABC Color que la actividad se llevó a cabo en el marco del Día Mundial de la Cetrería que se dio el pasado 16 de noviembre. Además de celebrar la fecha, los miembros tenían como objetivo recaudar un poco de fondos para promover la crianza de estas aves rapaces.
Otro de los objetivos que tienen es impulsar una legislación que reglamente la conservación de estas aves.
Al inicio, los niños tenían cierto temor de cargar a las aves, pero gracias a la instrucción de los miembros de la asociación, lo superaron y se tomaron fotografías con ellas. Todos los interesados daban un aporte voluntario antes de perpetuar la imagen con el alado.
“Son aves que están entrenadas. Si bien conservan sus instintos salvajes, se las puede domesticar. Están acostumbradas a que se les pueda alzar”, dijo Ortega.
Los niños también tuvieron la oportunidad de darle color a siluetas de búhos, lechuzas y halcones, tomando como modelo los ejemplares exhibidos.
Sobre la alimentación de las aves, Ortega indicó que todo depende de la especie, ya que algunas comen más y otras menos. El alimento base de todas es la carne de codorniz y otras consumen pelo de otros animales.
“Un gavilán de Harris hembra puede comer una codorniz por día”, recalcó el cetrero, quien relató que la asociación cuenta con un veterinario.
Para conocer más detalles sobre la asociación puede consultar con la fanpage en Facebook de la APCCAR.