Las ocupaciones de esta plaza, en su mayoría por grupo de indígenas, se evitaron hasta hace un par de años. Actualmente, de nuevo, el lugar está tomado en gran parte por los nativos con el aval de Mario Ferreiro. “Adornan” este espacio verde las carpas de hule negro y los baños improvisados que despiden malos olores. Los tradicionales bancos de madera lentamente van desapareciendo, ya que son usados como leña para las fogatas. Otro sector en el que avanzan las ocupaciones “provisorias” es la Costanera. En uno de los bancos de arena en la zona de la concurrida avenida se están instalando casas de madera e incluso de materiales, autorizados por la Comuna.