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La empresa dice que el relleno sanitario está muy bien administrado actualmente y que ellos han transformado "un tenebroso vertedero en un relleno sanitario".Unas 700 toneladas de basura ingresan a diario al Módulo IV, sector activo del vertedero Cateura. Esta basura viene de Asunción junto a 12 camiones de otras comunas del Area Metropolitana.
El Lic. Enrique Ortuoste, director de Empo y el Ing. Oscar López, director técnico, explicaron en visita a ABC Color sobre la situación actual del vertedero. Desmienten que la firma haya violado el contrato de concesión y que esté contaminando el sector. Ambos consideran que antes de la concesión en el 2003 y 2004 Cateura estaba colapsada y se constituía en una bomba de tiempo. "No había capacidad y el manejo era realmente desprolijo. Existía mucha contaminación pues técnicamente no había contención de lixibiado y la basura se arrojaba en cualquier lugar según el criterio de los conductores de camiones recolectores. Era un caos", dijo Ortuoste.
Precisó que desde la concesión en 2005 lo que se hizo fue sanear el lugar y reacondicionar todo el sector. "Se aplicó un nuevo criterio técnico de ingeniería en operación de relleno sanitario, con máquinas de mayor capacidad, criterios técnicos y se optimizó el espacio físico que había en Cateura. Esta situación hace que siga operando. Aparte de ganar mayor espacio, también hubo una mitigación ambiental que no se daba antes".
Oscar López detalló que se ha cercado el lugar para su delimitación, se puso una caseta de control para el ingreso y la cobertura del residuo. Se logró una mayor capacidad volumétrica fundamentada en una serie de estudios técnicos. También comenzó el tratamiento del líquido lixibiado. "Antes no tenía contención por lo que se debió realizar un dique de contención y bombear el líquido a la pileta de impermeabilización con sellado de base que resiste a la migración y a la filtración de los líquidos provenientes de la descomposición de residuos".
Esta situación también permitió a los gancheros trabajar en celdas donde se descarga la basura y es segregada para luego llevar el resto al Módulo IV de disposición final. Los gancheros fueron censados y se organizaron. Hoy trabajan en el lugar un total de 600 en cinco asociaciones. Se benefician con programas sociales y cuentan con un dispensario médico. Los niños tienen una escuela de fútbol y un parque infantil.
Parquización
El Módulo I se creó en 1988 y como ya cumplió los 20 años que la técnica determina para la degradación ya está estabilizado el bloque por tanto se puede destinar a otras actividades. De ahí que se decidió su parquización, dijeron López y Ortuoste. "El parque ecológico es como un Ñu Guasu para los vecinos y los niños tienen una plaza contigua con jardines y juegos".
El Lic. Enrique Ortuoste, director de Empo y el Ing. Oscar López, director técnico, explicaron en visita a ABC Color sobre la situación actual del vertedero. Desmienten que la firma haya violado el contrato de concesión y que esté contaminando el sector. Ambos consideran que antes de la concesión en el 2003 y 2004 Cateura estaba colapsada y se constituía en una bomba de tiempo. "No había capacidad y el manejo era realmente desprolijo. Existía mucha contaminación pues técnicamente no había contención de lixibiado y la basura se arrojaba en cualquier lugar según el criterio de los conductores de camiones recolectores. Era un caos", dijo Ortuoste.
Precisó que desde la concesión en 2005 lo que se hizo fue sanear el lugar y reacondicionar todo el sector. "Se aplicó un nuevo criterio técnico de ingeniería en operación de relleno sanitario, con máquinas de mayor capacidad, criterios técnicos y se optimizó el espacio físico que había en Cateura. Esta situación hace que siga operando. Aparte de ganar mayor espacio, también hubo una mitigación ambiental que no se daba antes".
Oscar López detalló que se ha cercado el lugar para su delimitación, se puso una caseta de control para el ingreso y la cobertura del residuo. Se logró una mayor capacidad volumétrica fundamentada en una serie de estudios técnicos. También comenzó el tratamiento del líquido lixibiado. "Antes no tenía contención por lo que se debió realizar un dique de contención y bombear el líquido a la pileta de impermeabilización con sellado de base que resiste a la migración y a la filtración de los líquidos provenientes de la descomposición de residuos".
Esta situación también permitió a los gancheros trabajar en celdas donde se descarga la basura y es segregada para luego llevar el resto al Módulo IV de disposición final. Los gancheros fueron censados y se organizaron. Hoy trabajan en el lugar un total de 600 en cinco asociaciones. Se benefician con programas sociales y cuentan con un dispensario médico. Los niños tienen una escuela de fútbol y un parque infantil.
Parquización
El Módulo I se creó en 1988 y como ya cumplió los 20 años que la técnica determina para la degradación ya está estabilizado el bloque por tanto se puede destinar a otras actividades. De ahí que se decidió su parquización, dijeron López y Ortuoste. "El parque ecológico es como un Ñu Guasu para los vecinos y los niños tienen una plaza contigua con jardines y juegos".