Afirman que monseñor Livieres es inocente

El abogado José Gaspar Fleitas, miembro titular de la Unión Internacional de Jurisconsultos Católicos, con sede en Roma, indicó que las acusaciones que pesan sobre monseñor Jorge Livieres Banks son producto de una difamación, injuria, calumnia y extorsión.

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Señaló que monseñor Livieres tiene una digna carrera sacerdotal, como seminarista, como sacerdote, párroco en la iglesia San Roque, como obispo auxiliar, como obispo diocesano y como miembro de la Conferencia Episcopal Paraguaya.

‘‘Realmente vengo preocupado, golpeado muy bruscamente por esta difamación absolutamente preconcebida, por otros intereses extraños a la Iglesia’’, aseveró.

Sostuvo que monseñor Livieres es un ejemplo en el sacerdocio y en el episcopado paraguayo. ‘‘Puedo asegurar moral, jurídicamente y socialmente y como miembro del apostolado de la Iglesia la absoluta inocencia de monseñor Livieres, nacido en una familia honorable, un obispo ejemplar, que nunca hizo ostentación ni de riqueza, ni de poder, sino él todo ha sido servicio para el necesitado’’, refirió.

El religioso afirmó, en representación de la Unión Internacional de Jurisconsultos Católicos (que hace una semana fue erigido como el instituto de Derecho Pontificio y cuyo presidente es el papa Juan Pablo Segundo), que monseñor Livieres es inocente.

‘‘Vengo a manifestar una aclaración, poniendo mi ciencia, mi conciencia y mi persona por la persona de monseñor Livieres, a quien lo voy a defender en todas las instancias’’, sostuvo.

El religioso lamentó que la Facultad de Ciencias Jurídicas y Ciencias Diplomáticas de la Universidad Católica no se haya manifestado al respecto. Aquí desde Asunción, como en Encarnación, también nosotros sabremos defender la dignidad de la Iglesia, concluyó.

‘‘INOCENTE HASTA QUE SE DEMUESTRE LO CONTRARIO’’

‘‘Es inocente hasta que se demuestre lo contrario’’, dijo el nuncio papal, Mons. Antonio Lucibello, sobre el supuesto caso de acoso sexual a tres jóvenes de parte del obispo de Encarnación, Mons. Jorge Livieres Banks.
La denuncia que trascendió ayer causó un gran revuelo en el ambiente eclesial, y algunos obispos hasta manifestaron que el ambiente político, de acusación de uno contra otro, es el ambiente propicio para este tipo de denuncia.
Para el representante de la Santa Sede, hay toda una campaña mundial que quiere desprestigiar a la Iglesia Católica. Citó el caso de los arzobispos de Sidney (Australia) y Chicago (EE.UU.) que fueron acusados de acoso sexual, pero luego se demostró que fueron víctimas de un chantaje.
‘‘Estamos en el ojo de la opinión pública y de personas malintencionadas que en cualquier momento nos pueden acusar. Hoy en Italia se cuidan hasta para acariciar a los niños’’, puntualizó.
Lucibello no descartó también que cuestiones económicas estén detrás de esta maniobra, dando a entender que los denunciantes hasta podían estar movidos por necesidades pecuniarias.
Preguntado qué medidas tomará la Iglesia al existir una denuncia tan seria contra el obispo, indicó finalmente: ‘‘Si no hay prueba arrimada por la justicia, continúa en el cargo’’.

TENDRIA TRASFONDO POLITICO DICE VOCERO DE LA CEP

El obispo auxiliar de Asunción y secretario general de la Conferencia Episcopal Paraguay, Mons. Ricardo Valenzuela, no descartó la existencia de un trasfondo político detrás de la denuncia por ‘‘acoso sexual’’ que presentaron contra el ex presidente del colegiado episcopal, Mons. Jorge Livieres Banks. ‘‘Hay muchos intereses, además la coyuntura política que vive el país, de acusación de uno contra otro, puede generar este tipo de chantaje’’, precisó.
El vocero de los obispos adelantó que la CEP no emitirá ningún documento al respecto. Aclaró que primero se contactará con los demás obispos y con cautela se analizará el caso porque Mons. Livieres Banks es una personalidad muy importante en la Iglesia.
El obispo encarnaceno fue presidente de la Conferencia Episcopal Paraguaya. Entregó el cargo el mes pasado a Mons. Claudio Giménez, obispo de Caacupé.
Valenzuela se mostró sorprendido por la denuncia de los jóvenes. ‘‘Nos desayunamos con esta noticia y se debe tratar con mucha delicadeza para no ofender a nadie’’, puntualizó. Agregó que la cordura debe primar en estos casos porque una falsa acusación puede perjudicar a la persona. El obispo reiteró que este tipo de denuncia debe ser tratado con mucho cuidado porque en otros países se utilizó la difamación para desacreditar a los sacerdotes, que luego resultaron ser inocentes.
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