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Valenzuela reiteró que el suboficial mayor Lucio Natividad Recalde Melgarejo y el suboficial Santiago Ferreira Coronel fueron los que abrieron la armería de la Jefatura Policial de Pedro Juan Caballero y extrajeron los 252 kilos de cocaína y tiraron al patio de la Gobernación.
Agregó que los ocupantes de un vehículo rojo que se encontraba en la Gobernación alzaron la droga y se la llevaron.
Valenzuela indicó que no pudo identificar a los ocupantes del rodado porque tenía vidrios polarizados.
El testigo dijo que los que tenían la llave de la armería eran el subjefe policial de apellido Fernández y el suboficial Celso Fleitas.
Indicó que Ferreira le manifestó que el dueño de la carga era Clemencio González Giménez, alias Gringo.
Valenzuela declaró que la entrega de la droga no hizo constar en el acta de la guardia porque tenía miedo ya que le amenazaron de muerte. “Me iban a matar allí mismo”, testificó.
Buen “premio”
Para calmarlo, Recalde y Ferreira le dijeron a Valenzuela que el dueño de la droga les iba a dar un “buen premio” que consistía en unos US$ 250.000, que debían repartirse y que para ello “tenía que callarse” .
Valenzuela actualmente se encuentra bajo el sistema de protección de testigos y su resguardo está a cargo del Ministerio Público.
De la diligencia de anticipo jurisdiccional de prueba participó el fiscal de la Unidad Antidrogas Ysaac Ferreira.
Reconstrucción
El 6 de febrero, a las 20:00, se llevará adelante la reconstrucción del hecho, en la jefatura del Amambay, con presencia de las partes.
Los 252 kilos de cocaína fueron incautados el 10 de enero pasado en la estancia “Camba Cua”, de Pedro Juan Caballero. En la madrugada del sábado 17 de enero la droga fue devuelta por los policías a “Gringo”, quien se encuentra prófugo.