Sicario paraguayo cae abatido en nuevo enfrentamiento en Limpio

El asaltante paraguayo que el domingo de mañana había escapado herido de un enfrentamiento en el cual falleció su cómplice brasileño, finalmente fue eliminado ayer de mañana por la Policía en otra balacera desatada en un esteral de Limpio, cerca del cauce del río Paraguay. Con la muerte de ambos criminales, quedaron aclarados varios sonados casos.

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El criminal abatido ayer fue identificado como Rosalino Martínez Méndez, de 26 años, quien era buscado desde abril del año pasado, cuando asesinó a tiros a la empresaria Nora Florenciano Pereira, en la ciudad de Choré, departamento de San Pedro, “trabajo” por el cual cobró G. 15 millones y que fue ordenado por algunos integrantes de la familia de la víctima, en el marco de una disputa por una herencia.

El peligroso malviviente compatriota había escapado herido el domingo de mañana de un enfrentamiento ocurrido en el barrio Santa Rosa de Limpio, contra agentes de la División de Investigación de Delitos del departamento Central, más conocida como la Brigada Central, que a su vez también tuvo dos baleados, el subcomisario Francisco Joel Talavera Jara (está delicado, en terapia intensiva) y el oficial primero José Miguel Vázquez Mendoza (fuera de peligro).

En la balacera del domingo, sin embargo, ya había caído muerto otro de los miembros de la gavilla, el brasileño Leandro Mariano Matto, de 31 años. Este último era un fugitivo de la cárcel de Villarrica, con 14 órdenes de captura por asalto y violación en Paraguay, así como con una condena pendiente de 37 años de prisión por el asesinato de un agente de la Policía Militar, en Brasil.

El titular de la Brigada Central, comisario principal Rubén Paredes, explicó ayer que desplegaron varios equipos de búsqueda del fugitivo, que trabajaron durante toda la noche del domingo y la madrugada de ayer, hasta que a las 7:30 y con acompañamiento del Ministerio Público localizaron al delincuente paraguayo en un esteral que conduce a un afluente del río Paraguay, en el predio de la Dinac, al otro lado de la avenida San José de Limpio, específicamente a 2.500 metros del lugar del tiroteo del domingo a la mañana. Rosalino Martínez Méndez estaba equipado con un chaleco antibalas y tenía una pistola Beretta calibre 9 milímetros.

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