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Supuestamente, dos vehículos se interpusieron al rodado y un grupo de 10 asaltantes encapuchados y fuertemente armados redujeron a los tres empleados de la empresa de seguridad.
El supervisor Martínez Cabañas relató que sus dos compañeros fueron bajados del vehículo y que quedaron bajo custodia de otros maleantes, mientras él fue obligado a permanecer dentro de la patrullera, que fue abordada por seis de los miembros de la banda.
Esperaban la hora exacta
Posteriormente, los delincuentes recorrieron por casi tres horas a bordo de la patrullera, pero con el supervisor como rehén, mientras esperaban que sea la 01:00 de la madrugada. “Recorrimos todos apretados en el vehículo, porque uno de ellos decía que debían entrar a la empresa recién a la 01:00”, contó la víctima ayer en sede de Investigación de Delitos, donde además prácticamente aseguró que algunos de sus compañeros entregaron datos a la banda para facilitar el multimillonario robo.
“Todo fue muy llamativo, porque los asaltantes sabían bien a qué hora debían entrar y justo a esa hora se hacía el cambio de guardia. Después, cuando llegamos a la empresa, me abrieron rápidamente el portón, algo que también fue raro, porque mi ronda suele terminar recién a las 06:00 y pese a eso me abrieron tranquilamente”, señaló el supervisor de la firma.
Otro detalle que reveló es que los maleantes, antes de entrar a la empresa, empañaron los vidrios del vehículo respirando aceleradamente adentro.
“El robo del siglo”
Una vez dentro de la base de la firma, ubicada en Teniente Alcorta N° 255 casi Teniente Ayala, los seis asaltantes descendieron con sus armas largas y algunos ya se quitaron la capucha. Después redujeron a todos los demás vigilantes, quienes no efectuaron si quiera un solo disparo, pese a que también estaban armados.
Cuando los malvivientes ingresaron al salón, obligaron a todos a acostarse en el piso. El líder de la banda sabía detalladamente el manejo interno de la empresa de seguridad, ya que comenzó a dar instrucciones a los demás criminales sobre cada uno de los ocho puestos que eran custodiados antes de llegar a la bóveda, colocada en la planta alta del edificio, donde un cajero estaba clasificando los billetes de varias empresas clientes y que debían ser depositados hoy en distintos bancos.
Una vez arriba, recién tras varios minutos abrieron a golpes la puerta, ya que el cajero Jorge Méndez Saldívar no tenía las llaves, aunque tampoco este llamó a la Policía mientras violentaban su sector. Finalmente, los maleantes tomaron todo el efectivo que había en una mesa y que totalizó nada menos que G. 5.190.619.328.
Pero los sujetos increíblemente no pudieron abrir la bóveda, donde había un monto muy superior y que si también era llevado podría tratarse del “robo del siglo”, dijeron los policías que participan de la investigación.
El golpe fue filmado por el circuito cerrado de la empresa, pese a que los maleantes llevaron la CPU.
Últimos golpes a la empresa
30 de abril de 2012: Un grupo comando conformado por 15 a 18 sujetos fuertemente armados robó G. 3.500 millones al interceptar a tiros un móvil transportador de caudales de la firma “Guardián SA”, en el kilómetro 194 de la Ruta VII “José Gaspar Rodríguez de Francia”, en la zona de Doctor Juan Manuel Frutos, ex Pastoreo, departamento de Caaguazú.
10 de noviembre de 2011: En un asalto de película, un grupo comando se alzó con G. 2.000 millones al atracar un móvil transportador de caudales de la firma “Guardián SA”, en el kilómetro 214 de la Ruta X “Las Residentas”, en la compañía Sanguina Cue del distrito de Yrybucuá, San Pedro.
9 de setiembre de 2010: Un equipo de más de 10 delincuentes falló en su intento de robar el caudal que era transportado en un móvil de la firma “Guardián SA”, luego de que los guardias respondieran al tiroteo. Ocurrió en el kilómetro 50 de la Ruta VII “Gaspar Rodríguez de Francia”, en el distrito de Yguazú, departamento de Alto Paraná.
28 de enero de 2010: Una banda interceptó a tiros un transportador de caudales de “Guardián SA”, en el kilómetro 47 de la Ruta III “Gral. Elizardo Aquino”, en Arroyos y Esteros, pero justo cuando iban a abrir la caja fuerte llegó la Policía y optaron por huir.
28 de diciembre de 2009: Un móvil transportador de caudales de la empresa “Guardián SA”, que llevaba un millonario monto de dinero a Asunción, casi fue asaltado por maleantes, en la zona de Campo Arado, a la altura del kilómetro 196 de la Ruta VII “Gaspar Rodríguez de Francia”, distrito de Juan Manuel Frutos, departamento de Caaguazú. Los guardias repelieron el ataque a tiros y escaparon.
“Están complicados algunos personales”, dice
El teniente coronel retirado Aníbal Emilio Sapriza Nunes, dueño de la empresa de seguridad privada Guardián SA, dijo ayer que “probablemente están complicados algunos personales, los que estaban de servicio y los que estaban en la bóveda”, al ser consultado sobre el llamativo, insólito y multimillonario golpe en su local.
El militar retirado confirmó que los maleantes manejaban detalladamente el movimiento de la empresa. Con respecto a los G. 5.190.619.328 que fueron robados, Sapriza Nunes indicó que en la bóveda había un monto bastante superior, aunque tampoco quiso precisar cuánto. “Pero una bóveda es una bóveda”, declaró.