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Los cigarrillos no tenían ninguna documentación que acredite su ingreso legal al Brasil, pero llegó hasta la zona de Presidente Epitácio, estado de São Paulo. Según los datos, los productos eran transportados en diez camiones de gran porte y solamente una persona finalmente quedó detenida, que era el chofer que manejaba uno de estos camiones. El resto escapó.
En principio, los informes desde Brasil indican que las marcas confiscadas son “R7” y “TE”, que en nuestro país son producidos por “Tabacalera del Este SA” (Tabesa).
Algunos de los camiones tenían chapa paraguaya y otras brasileñas. La Policía Federal está actualmente investigando el caso, según reportes de medios brasileños.
Para Brasil, el ingreso de cigarrillos de contrabando desde Paraguay representa uno de los más grandes problemas, por la evasión de tributos. Según datos que manejan entidades gubernamentales del vecino país, solamente en un año la cantidad de cigarrillos incautados representó una evasión tributaria de 1.400 millones de dólares para el fisco brasileño.