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Las víctimas, Fernando Insfrán (29), su pareja Antonia Cuella (47), y un hijo de 15 años de esta, coincidieron en que los tres miembros del grupo armado que los tomaron de rehenes no pasaban los 23 años de edad.
Le apuntó a uno de ellos
El primero en ser reducido por los criminales fue el menor de 15 años, pero cuando llegaron al lugar su madre y su padrastro, este extrajo su revólver y le apuntó a uno de los miembros del EPP, como para dispararle, pero optó por entregar su arma al ver que el adolescente también podría ser ejecutado.
Los fusileros del EPP dejaron una nota, exigieron el cese del cultivo de soja y que los animales no sean enviados hacia un cerro que hay en la zona, además de amenazar con matar a los guardias de la propiedad si no renuncian.
Antes de huir, los criminales obligaron a la mujer a matar una gallina y también se llevaron huevos caseros.
El lugar atacado se encuentra muy próximo a la estancia “María Auxiliadora”, propiedad de Salyn Macchi, pero arrendada desde hace seis años por el brasileño Pedro Gomes da Rocha.
Justamente tres vacas pertenecientes al extranjero fueron baleadas por los miembros del EPP durante la fuga. Una de ellas falleció, aunque de todos modos las tres fueron faenadas.