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Precisamente, Víctor Servián, quien se desempeñaba como director de la cárcel pedrojuanina, fue nombrado en el cargo de director de Institutos Penitenciarios tras la masacre registrada en la tarde del pasado domingo 16 de junio en la regional de San Pedro, que les costó la vida a 10 reos y otros tantos resultaron con lesiones de consideración.
Esta situación generó malestar entre los funcionarios del Ministerio de Justicia, ya que necesariamente Servián sabía de la existencia de celdas vip, equipadas con todos los lujos posibles, en la cárcel Pedro Juan Caballero, que hasta una semana atrás estaba a su cargo.
Es más, los líderes del PCC utilizaban estas celdas, que más se asemejan a habitaciones de hotel de cinco estrellas, para dirigir las operaciones, al margen de la ley, que ejecutan los miembros de la facción criminal en la frontera entre nuestro país y el Brasil, según la Policía.
Los investigadores también sospechan que desde estas “habitaciones” se planificaban acciones y ataques en el marco de la guerra contra otros grupos criminales en busca de controlar el mayor corredor de drogas, armas y municiones desde el Paraguay hacia las principales ciudades del vecino país.
Esta disputa entre grupos criminales ha convertido a la región comprendida entre Pedro Juan Caballero y Ponta Porâ, Brasil, en una de las más peligrosas del continente, con un promedio de 120 crímenes por año. La existencia de celdas vip en la cárcel de Pedro Juan fue descubierta el viernes último durante una requisa llevada a cabo por la Policía ante rumores de fuga.
Falla en sistema de seguridad
Víctor Servián aseguró ayer que la masacre en la cárcel regional de San Pedro se registró a causa de una falla en el sistema de seguridad que en el momento de mayor afluencia de visitantes no pudo aislar a los miembros de las facciones del PCC y del clan Rotela. Igualmente la autoridad carcelaria afirmó al programa Contacto Ciudadano de ABC Cardinal que las salidas de reos únicamente pueden ser autorizadas por orden judicial, más aún en casos de procesados por hechos de narcotráfico, al referirse al caso de un recluso que salió de la cárcel de San Pedro para participar de una fiesta.