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El primer cuerpo, el de un hombre adulto, que sería Julio Rojas Delvalle (52 años), fue descubierto aproximadamente a las 16:00, luego de que los usuarios del transporte público que aguardaban sobre Oliva percibieran un fuerte olor que salía del predio de una vivienda y estacionamiento privado.
El cadáver fue sepultado a medias en un pasillo, a una profundidad de 30 centímetros y cubierto con mezcla de cemento y cal. La tormenta del fin de semana agrietó la improvisada tumba y el agua alcanzó el cuerpo, por lo que el olor invadió la zona.
Pese a que el primer cuerpo ya había sido retirado del lugar, el olor nauseabundo seguía siendo muy intenso, por lo que los agentes de la comisaría 1ª Metropolitana y los funcionarios de la Fiscalía revisaron un viejo baño situado en el fondo de la propiedad, donde hallaron otra fosa común cubierta del mismo modo que la anterior.
Dentro de ella, encontraron otros tres cuerpos, el de una mujer adulta, que sería la esposa de Julio, Elva Graciela Rodas de Rojas (51), así como el de una mujer joven, que sería la hija del matrimonio, la luchadora Dalma María Rojas Rodas (25), y el de un niño de unos seis a ocho años, que sería el hijo mayor de esta última.
Posteriormente, ya con presencia de policías de casi todas las unidades especializadas y con un refuerzo considerable de funcionarios del Ministerio Público, fue desenterrado en otra excavación clandestina el cuerpo de otro niño de entre unos cuatro y seis años, que sería el hijo menor de Dalma.
Las identidades serán confirmadas plenamente hoy, luego de la autopsia en la que también se determinarán las causas y circunstancias de muerte.
La dantesca escena rápidamente causó una conmoción a nivel nacional.
Primer detenido
En pleno procedimiento, ya en horas de la noche, fue detenido el primer sospechoso del brutal ataque, el chacariteño Marcelo Gabriel José Díaz (21), quien estaba observando el levantamiento de los cuerpos y fue delatado por su nerviosismo.
Al ser interrogado, el joven admitió haber estado en esa casa el sábado último, cuando participó de una fiesta organizada por el novio de Dalma, el también luchador Bruno Javier Marabel Ramírez (19), oriundo de la ciudad de Itá.
Marcelo dijo que Bruno estaba ese día con otro hombre y con tres mujeres extraños.
Supuestamente, Marcelo le preguntó a Bruno dónde estaban Dalma, sus padres y sus hijos, y Bruno contestó que habían viajado y que regresarían en dos semanas.
Sin embargo, ya en ese momento los cinco cuerpos estaban enterrados en las fosas clandestinas rellenas con cemento, justamente sobre las cuales se llevaba a cabo la macabra fiesta.
Enfrentamiento
Con los datos aportados por Marcelo, un equipo especial de la Policía, encabezado por agentes de Homicidios, rastreó el celular del sospechoso Bruno Marabel en la zona de Calle Última, en el límite entre Asunción y Fernando de la Mora.
Bruno estaba a bordo de un taxi y cuando se percató del procedimiento en su contra bajó del coche y disparó con un arma contra los policías intervinientes. Estos respondieron al fuego y se desató un enfrentamiento.
Tras la refriega, Bruno escapó momentáneamente, aunque el taxi en el que pretendía huir fue detenido en San Lorenzo y uno de sus ocupantes quedó arrestado. Se trata de Jorge Luis Samaniego López (36), compueblano de Bruno y señalado también como participante en el quíntuple homicidio, al menos en carácter de cómplice.
Ya cerca de las 22:00, el principal sospechoso, Bruno Marabel, fue interceptado tras pasar el puente Remanso hacia la frontera con Argentina, país al cual pretendía escapar.
Al cierre de esta edición, la Policía había reportado también la detención de dos jóvenes mujeres, una tal María Araceli Sosa (23) y otra que sería Alba Rosalía Armoa Núñez (18), quienes habrían participado de la fiesta que se hizo el sábado último en la casa donde estaban enterrados los cinco cuerpos.
Redes sociales
Las redes sociales de la luchadora Dalma María Rojas Rodas fueron determinantes para entender la trama de esta trágica historia.
Resulta que, aparentemente, Dalma y Bruno mantenían una relación muy intensa desde hace varios meses, que se interrumpió hace un mes. Presuntamente, Bruno no aceptaba el cese del noviazgo y venía amenazando a Dalma.
En el Facebook, por ejemplo, también apareció otra amenaza contra Dalma, de un tal Carlos Miranda, que sería el exesposo de la chica y padre de uno de sus hijos.
¿Pasional o por dinero?
Al menos hasta anoche, había dos hipótesis como causantes del quíntuple homicidio. Una sugiere un crimen pasional, motivado por el fin de la relación entre Bruno Marabel y Dalma Rojas, quienes hasta hace un mes se veían muy enamorados en sus perfiles de redes sociales, hasta que el joven empezó a amenazarla porque ya no le contestaba sus mensajes.
La otra se refiere a un probable cobro de un dinero del cual se beneficiarían Dalma y su familia y Bruno sabía de ello, pretendiendo quedarse con ese caudal.
La confesión de Bruno Marabel podría cerrar el caso.