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El fiscal José dos Santos argumentó que no es por un capricho del Ministerio Público que solicita al juzgado que a las imputadas por lesión de confianza y por producción de documentos no auténticos (como autoras) Ninfa Thomaz Rudis y María Beatriz Gill Ávalos se les mantenga la prisión preventiva ante el peligro de fuga por la elevada expectativa de cárcel, que podría llegar a 15 años para las mismas.
Dos Santos también sostuvo en la audiencia que la Fiscalía tuvo en cuenta la importancia del perjuicio causado y la reprochabilidad que se les atribuye a las procesadas. La sucursal de Ára de Finanzas en Pedro Juan Caballero, donde trabajaban ambas mujeres, registró un faltante de más de US$ 5 millones.
El fiscal concluyó que el peligro de fuga aún subsiste y que las imputadas debían seguir con prisión preventiva.
El fiscal agregó que la calidad de autoras que pesa sobre Gill Ávalos y Thomaz Rudis es un factor fundamental para que se mantenga la prisión preventiva, a diferencia de otros procesados para quienes solicitó medidas alternativas porque fueron imputados como cómplices (pena reducida).
Dos Santos adelantó que apelará la resolución del juez que favoreció a las procesadas por el vaciamiento de Ára de Finanzas.
Sin embargo, el juez Ayala Brun consideró que los hechos punibles por los cuales Thomaz Rudis y Gill Ávalos fueron imputadas tienen como expectativa de prisión, según el tipo base, hasta 5 años de prisión o multa.
El peligro de fuga, a criterio del juez, no existe porque el juzgado aceptó las fianzas reales y personales. A los abogados Claudio Lovera y Alba Zaracho, el juzgado les impuso G. 400.000.000 a cada uno como fianza personal.
A la imputada Gill Ávalos se le ordenó fianza real sobre un inmueble ubicado en Pedro Juan Caballero por G. 500.000.000. A Thomaz Rudis no se le aplicó fianza real, según la resolución del juez Ayala Brun.
Según las fuentes, el principal “cerebro” de la desaparición de US$ 14 millones de Ára de Finanzas, Sosa Palmerola estaría operando para liberar a los procesados en el caso para que no delaten las maniobras del vaciamiento.