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La fuga de los presos fue detectada ayer recién a las 06:30, durante el control general de internos, según declaró el director del penal, Christian González.
Al pasar lista de los reos, los guardiacárceles notaron que faltaban cinco de los seis convictos que habitaban la celda número 11 del Pabellón “E” Alta.
Los que escaparon fueron individualizados como Gustavo Adolfo Caballero Duarte, Nery Felipe Pereira Báez, Diosnel Morínigo, Ricardo Manuel López Céspedes y José Buenaventura Ozorio Ozorio, todos procesados por asalto y que forman parte de los 1.110 reclusos de dicho penal.
Tres horas después de que ocurriera el escape, los únicos 10 guardiacárceles encargados de la custodia interna y los seis guardias privados de la empresa “Tapití” que cubren el perímetro externo fueron movilizados en busca de los delincuentes.
Aparentemente, al ganar la calle, los fugitivos siguieron caminos diferentes, por lo que la Policía hizo sobrevuelos en helicóptero en la zona del río Paraguay, que cruza por detrás del penal, y hacia la zona de la Ruta III “Gral. Elizardo Aquino”, en sentido opuesto.
Rápidamente, Ricardo López fue localizado al tratar de cruzar el río Paraguay, hacia atrás del penal. Al ser alteado, no obedeció y fue baleado en la cabeza. Al cierre de esta edición se encontraba en grave estado en el Centro de Emergencias Médicas.
Ya a las 08:30, personal de la comisaría 5ª Metropolitana recapturó en el complejo habitacional Pelopincho de la Chacarita (Asunción) a José Buenaventura Ozorio Ozorio, cuando estaba fumando crack en una casa. En principio, el marginal negó su identidad, que después fue corroborada por el sistema AFIS de la Policía.
La Policía siguió con el operativo de búsqueda, que por una parte estuvo a cargo del director de Apoyo Técnico, comisario general inspector Críspulo Sotelo, y del jefe de Policía de Cordillera, comisario principal Alejandro Cano. Fusileros del departamento Antinarcóticos también reforzaron la misión. Dos más
Anoche, alrededor de las 20:50, fueron recapturados Diosnel Morínigo y Gustavo Caballero. Ello ocurrió cuando aguardaban abordar un autobús en la ciudad de Emboscada. Luego, aproximadamente a las 21:30, fue atrapado, también en la Chacarita, el quinto integrante del grupo, Felipe Pereira Báez. Los cuatro fueron llevados al penal de Tacumbú.
Sospechosos
Por disposición de la fiscala de la causa Juana Carina Sánchez Fernández, quedaron aprehendidos el guardiacárcel Julio César Torres Ruiz y el guardia privado de la empresa “Tapití” Juan Ramón Bustos, cuyos puestos de vigilancia se ubicaban a solo 30 metros del vallado que atravesaron los presidiarios. Con relación al funcionario penitenciario, quien fue nombrado hace menos de un mes, se supo que su padre, Pastor Torres González, también se encuentra preso en la misma cárcel por estupro. Los celulares de ambos custodios fueron confiscados para ser sometidos a pericias.
La penitenciaría regional de Emboscada se encuentra en un terreno de 40 hectáreas, a 1.500 metros de la Ruta III, a la altura del kilómetro 44. De la antigua cárcel en 1998 escaparon 109 prisioneros.